LOS ANGELES CLIPPERS – SAN ANTONIO SPURS
No hay que fiarse de San Antonio, Volumen VI
Los Spurs buscan su segundo anillo consecutivo (el sexto en total) tras haber ganado 21 de sus últimos 25 encuentros. Chris Paul nunca ha jugado una final de conferencia.
Uno coge costumbres a lo largos de los años. No aceptes caramelos de desconocidos, cuidado con el coche si has bebido, sal cinco minutos antes de casa para no llegar tarde… y no infravalores a los Spurs. Deberíamos tener aprendida la lección. Pero no. Yo mismo, allá por febrero, pensaba: ‘No, este año ya sí que no. Mira Parker, tocado, Ginóbili jugando 15 minutos, Diaw que ya no está en forma…’. Pero no. Aquí estamos, en abril, como cada abril, como otros esos ‘abriles’ que acabaron en anillo, rindiendo pleitesía a esa pequeña ciudad de Texas. Y ojo, que hay cosas raras. Esa derrota ante los Pelicans en el último día les ha dejado sin ventaja de campo en primera y segunda ronda (salvo que Dallas pueda con Houston), y también para la final de Conferencia (si no llega New Orleans). Pero da igual. Porque si han perdido es porque algo tienen en la cabeza. Nos han acostumbrado a eso.
A simple vista, los Clippers no son el mejor rival posible. Han ido de menos a más, casi como los Spurs pero sin llegar a ese nivel de excelencia, y entran en los Playoffs con la idea de redimirse de sus continuas derrotas estos últimos años. La más dura, el curso pasado con aquella pérdida de Chris Paul ante los Thunder. El base todavía no ha pisado una final de conferencia, y debe hacerlo. Lo merece.
Los Clippers han terminado la temporada regular como el mejor ataque de la competición (109,8 puntos cada 100 posesiones), pero la defensa de San Antonio es top-3 NBA. Concretando, la visión general, más con la lesión de Splitter, es que los angelinos tienen ventaja física en la pintura pero la pierden fuera por Kawhi Leonard. El alero será el encargado de defender a Chris Paul en los momentos calientes y ha demostrado que está a un nivel defensivo espectacular. Esto favorece a San Antonio, que como decíamos en las claves libera a Tony Parker del esfuerzo defensivo, y mete en un problema a los Clippers, que necesitarán más de Jamal Crawford en la dirección para contrarrestar la presión sobre Chris Paul. JJ Redick ha cuajado su mejor temporada en la NBA y es vital para el tiro exterior de los de Doc Rivers. Por dentro, Popovich ya ha demostrado que no tiene reparos en realizar el ‘Hack-a’ y lo hará con DeAndre Jordan, que no llega al 40% de acierto desde la línea.
En ataque, San Antonio va con lo de siempre. Mover el balón aprovechando la movilidad en la zona de Boris Diaw y someter al rival desde el triple: Danny Green. Detener a Blake Griffin, clave. El ala-pívot promedia más de 25 puntos contra los Spurs esta temporada. Físicamente Popovich no tiene a nadie que pueda pararle, por lo que las ayudas entre Duncan, Baynes y Diaw serán necesarias.
La ventaja de San Antonio también la encontramos en el banquillo. Patty Mills ha recuperado su nivel tras la lesión y Ginóbili es Ginóbili. Jamal Crawford es fantástico en ataque pero sufre en defensa, y Chris Paul no va a poder con todos los exteriores rivales.