El Barcelona gana con nota
El equipo de Pascual alargó sus buenas sensaciones del Clásico de Euroliga con un buen triunfo a domicilio ante un UCAM Murcia que fue siempre a remolque de los azulgrana.


El UCAM Murcia jugó un notable primer cuarto. Tuvo al Barcelona cinco minutos sin más pan que un triple inicial de Abrines (8-3), ganó el rebote y anotó un impoluto 3/3 en triples. Radovic había acampado en el hueco que dejaba en el Barça la ausencia de Doellman y Wood entró en el partido con ocho puntos seguidos y sin fallo. Después de hacer todo eso en los primeros diez minutos…perdía 21-23. Casi una sentencia de muerte, como mínimo un presagio de lo que vino después: un partido bien dominado por un Barcelona que no abrió brechas dramáticas pero que controló el tempo, el juego y el marcador. La valoración final (67-94) da una pista seguramente mayor que la que aporta el marcador. Después de tumbar a Bilbao y Real Madrid en sus dos últimos partidos en su Palacio de Deportes, el Murcia perdió ante un Barcelona que le domina 13-0 en sus últimos 13 enfrentamientos, todos desde 2008.
El Barcelona ganó fuera y ganó jugando bien. Y eso que no debería ser noticia, lo es. Con ese triunfo, pone 7-7 su feo balance fuera del Palau, 3-7 en los últimos diez partidos… y a una semana de visitar al Real Madrid. El Barcelona ganó con las buenas sensaciones del Clásico de Euroliga intactas: defensa correcta y mucho flujo ofensivo, con una excelente circulación, buenos tiros (lo uno lleva a lo otro) y aportación coral. En total, 21 asistencias por 7 pérdidas y un repiqueteo desde la línea de tres que estropeó un 1/7 en el último cuarto (11/30 total). Y un buen partido como facilitadores de los pívots, con 6 asistencias entre Tomic y un Pleiss que no sólo empieza a jugar sin anteojeras sino que completó otro buen partido y lleva unos cuantos pareciendo de forma sostenida un sólido pívot suplente. No es mucho pero es el primer paso hacia una redención que parecía imposible hace dos meses.
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El Murcia anotó 21 puntos en el primer cuarto y 25 en todo el segundo tiempo. El Barcelona escapó antes del descanso cuando convirtió un 36-37 en un 36-46 después de un 3+1 de Navarro. El Murcia salió del descanso con un último impulso (48-50 en el minuto 25) pero le cayó encima una fase de inspiración de Thomas, que no había jugado en toda la primera parte. El último cuarto fue una sucesión de malos ataques de un equipo local que no encontró soluciones y que ya había perdido con cinco minutos por jugar (54-68 tras otro triple quirúrgico de Navarro). Wood no anotó desde el primer cuarto y sólo Radovic estabilizó un ataque en el que entre Bamforth, Lima, Neto y Antelo necesitaron 24 tiros para anotar 21 puntos.
Así que el Barcelona ganó bien, sin caer en esos pecados habituales que le tienen con ocho derrotas en Liga: regular y concentrado todo el partido y serio cuando las cosas amenazaban con torcerse. Se regaló un choque cuesta abajo en el que Huertas recuperó tono, Lampe volvió a cubrir bien la ausencia de Doellman y las ausencias de Nachbar y los exteriores aportaron de forma escalonada y incesante. Un buen Barcelona, en definitiva.



