Habló con AS desde Minnesota
Ricky: "Hay bases que anotan más, yo hago otras cosas"
El base español analiza con AS la actualidad de los Timberwolves, su difícil cuarta temporada en la NBA por las lesiones, el futuro de la Selección y las críticas sobre su tiro.
—Después de completar los 82 partidos de la temporada pasada, este curso ha sufrido un fuerte esguince de tobillo que le ha hecho perderse 47 de los 69 encuentros que lleva Minnesota. ¿Cómo se encuentra?
—Al volver estaba jugando con dolor y al final hemos decidido que lo mejor era parar. Ahora intentaré recuperarme lo antes posible para ayudar al equipo. Es frustrante, porque lo que un jugador quiere es estar en la pista y disfrutar. Pero la lesión no terminaba de curar.
—En Minnesota tienen un equipo joven y usted se ha convertido en uno de los líderes de la plantilla, ¿cómo se ve en ese nuevo rol?
—Ahora es más difícil porque no puedo jugar, pero estoy en la dinámica y lo que intento es enseñar. Que a pesar de que tenemos un mal balance de victorias y derrotas, hay que intentar ganar todos los partidos, lucharlos todos.
—En verano llegó a la franquicia Andrew Wiggins, el último número uno del draft y al que muchos comparan con LeBron James, ¿qué podemos esperar de ustedes en el futuro?
—Tenemos una buena base, con jugadores jóvenes y quizás lo que nos haga falta es un retoque con algún veterano. Esta temporada con tantas lesiones también ha venido bien para que los jóvenes jueguen y consigan esa experiencia. Nuestro objetivo es ir paso a paso, porque al final el luchar por cosas importantes depende de muchos factores, como las lesiones.
—Centrándonos en su figura, es uno de los máximos asistentes de la Liga, uno de los primeros en robos… Pero se vuelve a hablar de sus problemas en el tiro, ¿le parece injusto?
—Al final la gente enfoca sus comentarios en lo que un jugador no puede hacer, en lo que le falta. No se fijan en lo que haces bien y en mi caso yo creo que hago muchas cosas bien: defiendo, doy asistencias... y sigo trabajando en mi tiro.
—Ha asegurado muchas veces que el tiro es una cuestión de trabajo y confianza, ¿en qué momento se encuentra a nivel de confianza?
—Me encuentro como nunca. Y es algo que se ve en los partidos. Ya ha habido varios encuentros en los que llegamos apretados al último cuarto y me he jugado un tiro decisivo. Tengo mucha confianza y trabajo a diario. Sí que es cierto que no estoy teniendo los mejores porcentajes de mi carrera, aunque he mejorado el tiro a media distancia. Luego, las bandejas, por ejemplo, me cuestan, pero en eso también influyen las lesiones de rodilla y tobillo izquierdo, por el tema de saltar con una pierna… no vas con la misma fuerza que estando sano. Pero eso es todo mental y se ve en un jugador como Derrick Rose, que ya ha sufrido varias lesiones de gravedad.
—Estamos ante una de las mejores generaciones de bases de la historia de la NBA, en la que usted está incluido, ¿cree que se le exige más por el nivel de los otros?
—Todos anotan muchísimo y creo que yo destaco entre ellos porque soy la excepción. Mi juego es distinto, me dedico a otras cosas, a dar pases, a hacer jugar al equipo, y eso los compañeros lo agradecen.
—Ha logrado una gran fama entre los aficionados de la NBA precisamente por eso, por su estilo diferente. ¿Cree que podremos verle algún día en el All Star?
—Sería un sueño, claro. Cuando veía a Pau y Marc hacer el salto inicial en la última edición sí que lo pensaba algo más, dices ‘mira, podría estar ahí jugando con ellos’. Pero hay que ir paso a paso.
—Y más alguien que nada más llegar a Estados Unidos fue comparado con una leyenda como Pete Maravich y un ídolo de la última generación como Jason Williams.
—Es un sueño y un orgullo leer todas esas cosas. Es increíble, porque hay días en los que me levanto y todavía no me creo que esté jugando en la NBA.
—¿Y qué me dice de la Selección? En el mes de septiembre llega el Eurobasket, donde España necesita acabar entre los tres primeros para ir a los Juegos, y el equipo aún no tiene un seleccionador….
—Sinceramente, no he pensado en ello. Bastante he tenido aquí como para pensar en eso. Y más cuando todavía no hay ni seleccionador.
—En verano, durante la preparación para la Copa del Mundo, le vimos trabajar sus fundamentos ofensivos (tiros, bandejas, penetraciones...) con Sito Alonso, ahora entrenador del Bilbao Basket y segundo de Aíto García Reneses cuando usted jugaba en el DKV Joventut, ¿qué le parecería como seleccionador?
—Claro, lo ideal sería tener un seleccionador conocido, porque al final nosotros vamos poco tiempo a las concentraciones, pero como digo, ya se verá de aquí a verano.