SACRAMENTO KINGS
Lío en los Kings: Cousins, en contra del despido de Malone
La estrella del equipo se enteró del despido a través de Twitter y asegura que la decisión fue "inesperada" y "emocional" para el equipo.
La decisión de los Sacramento Kings de despedir a Mike Malone ha pillado por sorpresa no sólo a los aficionados del equipo, sino a la inmensa mayoría de aficionados de la NBA. El técnico había sido uno de los grandes artíficies del progreso y regularidad de DeMarcus Cousins, sentado ya en el podio de mejores pívots de la NBA, y había llevado a los Kings a uno de los mejores inicios de las últimas temporadas. Estas últimas dos semanas, con la baja por un virus de Cousins, el equipo había acumulado varias derrotas, y a la dirección de la franquicia no le ha temblado el pulso: el entrenador, destituido.
Desde los medios de comunicación de Sacramento han comenzado a salir frases y reacciones de Cousins y del resto del equipo. Hablan de un DeMarcus "sorprendido" y que no se esperaba el cambio de técnico. "Cousins se enteró por twitter. Ha dicho que la decisión ha sido inesperada y emocional para el equipo. Muchos creían en Malone. DeMarcus asegura estar decepcionado con la destitución porque cree que su baja afectó en la decisión", explica Jason Jones, periodista de 'Sacbee'.
Malone viajó este verano a España para estrechar su relación con Cousins y Rudy Gay, las estrellas del equipo que en ese momento jugaban el Mundial. Mejoró su relación ahí y la consolidó durante el 'training-camp', haciendo que la plantilla llegara en plena forma al inicio de temporada.
Las voces que más 'fuentes' NBA acaparan aseguran que esta decisión no ha sido fruto de las derrotas de estos días, y que viene del empeoramiento de la relación entre los jefes y el entrenador. Uno de los motivos, según Adrian Wojnarowski: el no-traspaso de Josh Smith. La dirección de los Kings quería conseguir a Josh Smith este verano, formando un 'Big Three' con Cousins y Gay. Malone se opuso. Fue el principio de su fin. Pete D'Alessandro, el General Manager, insistió pero los Pistons no estaban convencidos con lo que ofrecía.
Ahora los Kings se arriesgan a otra autodestrucción. Han echado a Malone, a parte del 'asunto Josh Smith', porque quieren un entrenador que juegue más rápido. Suena ilógico pensando que su mejor jugador es un pívot cuyo mayor talento es jugar en estático, en la zona. Han echado a un entrenador que se llevaba bien con Cousins, con lo que les costó hacerlo. Por el camino se quedaron Paul Westphal y Keith Smart sin que DeMarcus madurase, hasta que llegó Malone. Ahora se enfrentan no sólo a un entrenador nuevo con una plantilla nueva, si no a una nueva relación técnico-estrella que podría hacer explotar, otra vez, los cimientos del Sleep Train Arena de Sacramento.