MIAMI 92 - SAN ANTONIO 111 - (2-1)
San Antonio tiene ahora un 83% de opciones de ser campeón
Eso dice la historia: 30-6 en títulos para el equipo que gana el tercer partido cuando se llega con 1-1. Las 7 pérdidas de LeBron, su récord absoluto en finales.
¿Y ahora, qué? Pues según la historia, San Antonio Spurs ha dado un paso de gigante para cobrarse la revancha de la final de 2013 con un triunfo en Miami que voltea de nuevo una final que LeBron James había acercado a Florida tras el segundo partido. Queda mucho por jugar, claro, pero tradicionalmente el tercer partido resulta instrumental cuando se llega a él en una final con 1-1 tras los dos primeros: el 83% de los veces el campeón es el que gana ese game 3. En total, en 30 de 36 finales en las que el tercer partido ha servido de desempate, el campeón ha coincidido con el ganador de ese encuentro. Los noticias son aún peores para Miami Heat: sólo el 10% de las veces (2 de 20) el equipo que ha perdido ese tercer partido como local ha acabado siendo campeón.
Los Spurs también tienen una marca personal que les permite ser optimistas: en la era Popovich, tienen un récord de 15-3 en series a siete partidos en las que marchan 2-1 tras la disputa de los tres primeros duelos. Estos son otros de los importantes números estadísticos que dejó el primer partido de la serie en Miami o que está acumulando ya una final de excelente nivel:
El histórico primer tiempo de los Spurs: El equipo texano batió récords de anotación y porcentajes en una primera parte para el recuerdo en la que jugó un baloncesto perfecto. Puedes consultar aquí los números.
El factor Leonard: El alero llevaba al descanso los mismos puntos que en los dos primeros partidos... combinados. terminó con 29 puntos en una serie de tiro de 10/13. Los únicos que han logrado superar esa cifra en unas finales siendo más jóvenes que Leonard (22 años) han sido Magic Johnson, Kobe Bryant, Alvan Adams y Tommy Heinsohn. El alero, además, logró 16 puntos sólo en el primer cuarto. En los dos primeros partidos sumó 3 puntos entre los dos primeros cuartos.
Las pérdidas de LeBron: LeBron James perdió 7 balones. Su récord personal en un partido correspondiente a una final y una maldición para los Heat: sus equipos están 2-7 en partidos de lucha por el título si el Rey pierde 5 o más balones.
Bosh, bajo control: Popovich sacó del quinteto a Splitter y metió a Diaw para contrarrestar el juego abierto de los Heat. Le funcionó: Chris Bosh, decisivo en el segundo partido, se quedó en 9 puntos.Un dato demoledor: el ala-pívot entró en contacto con el balón en ataque 39 veces en el primer partido y 40 en el segundo: se quedó en 12 en los 34 minutos que jugó en este tercero.
Una hazaña estadística: El increíble acierto de los Spurs le sirvió para minimizar un buen partido en el tiro de los Heat, que anotaron el 52% de sus tiros. Desde que se reunieron LeBron, Wade y Bosh, la franquicia de Florida esatba 146-14 en partidos en los que el porcentaje colectivo de tiro había alcanzado como mínimo el 50%.
Las pérdidas de Miami Heat: En un día correcto en el tiro, las pérdidas de balón lastraron de forma drástica el ataque de Spoelstra.Fueron 20 y de ellas sacó San Antonio Spurs 23 puntos.
El factor Diaw: El francés está firmando unos playoffs extraordinarios. No sólo fue decisivo en la final del Oeste ante los Thunder, también está brillando en lo que va de serie ante Miami. Con él en pista, los Spurs tienen un +45 en diferencia de puntos. En el tercer partido, +20.
Popovich en las finales: El técnico de los Spurs ha alcanzado las 21 victorias en partidos de las finales. De esta forma queda por detrás de tres de los mejores entrenadores de la historia, un club al que él pertenece: Phil Jackson suma 47, Red Auerbach 40 y Pat Riley 26.