PRÓXIMA TEMPORADA
Los Lakers ya han hablado con Byron Scott y Mike Dunleavy
La búsqueda del entrenador entra en fase decisiva tras la lotería del draft. Kupchak asegura que busca técnico que saque lo mejor de la última etapa de Kobe Bryant.
De forma lenta y desde luego poco ruidosa, al menos para los estándares de la franquicia, los Lakers siguen con la búsqueda del entrenador que encaje en un puesto que le ha quedado muy grande tras la salida de Phil Jackson tanto a Mike Brown como a Mike D’Antoni. Mitch Kupchak, el General Manager, había dejado claro que la lotería del draft era el Rubicón a partir del cual el proceso se aceleraría. La lotería se ha realizado y los Lakers no han tenido suerte: elegirán séptimos y no tendrán salvo milagro a tiro a los jugadores más capacitados para suponer un impacto inmediato en la liga: Embiid, Wiggins, Parker o hasta Exum. Más probable es que lleguen a L.A. Randle, Smart, Aaron Gordon o Vonleh. Ahora toca encontrar un entrenador que, a partir de esta premisa, saque lo mejor de la última versión de Kobe Bryant (casi 36 años) y sus más de 48 millones de dólares por dos años.
“No creo que vayamos a cerrar el tema del entrenador en las próximas dos o tres semanas”, asegura un Kupchak a pesar de todo positivo. “Tenemos un jugador que ya ha demostrado lo que puede hacer en la liga (en referencia a Kobe Bryant) así que vamos a fichar a un entrenador que seca sacar lo mejor de él, ya sea como anotador o como generador de juego. Ahora mismo, este es un pilar fundamental en nuestra búsqueda. Kobe casi no jugó la temporada pasada pero ahora tiene buen aspecto. Su juego ya no es tan físico como en el primer tramo de su carrera y creo que a partir de ahora deberíamos verle postear mucho y que debería tener mucho el balón en las manos para crear juego. Él sabrá encontrar la manera de ser efectivo”.
En cuanto al draft, Kupchak no pierde su postura constructiva a pesar de que se esfumó el sueño de alcanzar un top-3: “Pienso que vamos a hacernos con un buen jugador en el número 7. No sé si será un jugador que pueda ayudar de forma inmediata a que la franquicia cambie de cara, pero no son cosas que haya que valorar tan a corto plazo”, asegura antes de acordarse de que Damian Lillard fue número 6 en 2012: “No creo que nadie pensara entonces que se iba a convertir tan rápido en el jugador que es ya. Ahora te das cuenta con perspectiva de que fue una elección extraordinaria. No creo que hayamos tenido mala suerte. Queríamos haber elegido más arriba, pero también podríamos haber caído al noveno puesto…”. Dentro de sus cábalas sigue estando, por supuesto, la posibilidad de traspasar el pick para agitar el mercado: “Cuanto más alta sea la elección, más vale. Eso está claro pero creo que este número 7 tiene un buen valor. Es algo que consideramos de aquí al draft”.
Byron Scott y Dunleavy, entrevistados
Por otra parte, ya se ha hecho público que los Lakers se han entrevistado con dos de los candidatos al puesto de entrenador, Mike Dunleavy y un Byron Scott que figura en casi todas las quinielas como uno de los favoritos para el puesto.
Dunleavy, que tiene ahora sesenta años, entrenó a los Lakers entre 1990 y 1992. El equipo ganó 58 y 43 partidos, y en la primera de esas dos temporadas llegó a la final, donde se topó con los Bulls de Michael Jordan y Phil Jackson, que avanzaban hacia el primero de sus seis anillos. Este período fue difícil: la transición post showtime y post Pat Riley, que cayó además en picado cuando Magic Johnson anunció que había contraído el virus del SIDA. Ya no estaban tampoco piezas clave como un Kareem ya retirado o un Michael Cooper que se había a Europa.
Dunleavy ha entrenado también a Bucks, Blazers y Clippers (hasta 2010, su última experiencia en los banquillos) y recientemente habló maravillas de los Lakers… por si acaso, claro: “Desde luego, sería una posibilidad muy interesante si se pusiera a tiro. Tuve una buena experiencia con ellos en los 90, muy buena, y ya hablamos la última vez que buscaban entrenador. Es una organización extraordinaria en la que todavía conservo buenos amigos”.
Dunleavy, al que también ha entrevistado Phil Jackson para ver si es la solución a la plaza todavía vacante en el banquillo de sus primeros Knicks, tiene a priori menos opciones que un Byron Scott al que muchos ven con los mejores ojos en el entorno angelino. No en vano jugó en los míticos Lakers del showtime (ganó 3 anillos entre 1983 y 1993) y estuvo, por cierto, a las órdenes de Dunleavy en su última etapa en Los Ángeles, antes de irse a Indiana. Más joven (53 años), fue elegio Entrenador del Año en 2008, al frente de unos Hornets que fueron una de las sensaciones del Oeste con Chris Paul a los mandos. Antes, tuvo un excelente paso por New Jersey Nets (2000-2004), a los que llevó a dos finales seguidas, una perdida ante los Lakers y otra ante los Spurs.
Su última etapa como entrenador la cubrió en Cleveland Cavaliers (2010-2013) y ya sonó como posible sustituto para Phil Jackson primero y Mike Brown después. Scott conoce la franquicia y tiene muy buena relación con Kobe Bryant, un asunto que desde luego le coloca más cerca que lejos del que será en cualquier caso uno de los asientos más calientes de toda la NBA la próxima temporada.