PREVIA | SPURS - THUNDER
La baja de Ibaka decanta el Oeste del lado texano
Durant y Westbrook contra la máquina de Popovich. La ausencia del ala pívot, clave. Los Thunder necesitan una solución en su pintura.
San Antonio Spurs y Oklahoma City Thunder se miden en una apasionante final de la Conferencia Oeste que tiene un único punto de partida: la ausencia, por lesión, de Serge Ibaka. El gigante hispano-congoleño se hizo daño en el gemelo y se perderá lo que resta de Playoffs. Una baja sensible y que cambia por completo la lectura de la serie. No obstante, no todo está perdido para Oklahoma ni para el aficionado que esperaba una serie igualada. Lo explicamos.
Antes de nada, y aunque suene contraproducente por sus excelentes Playoffs, no sería descabellado pensar que la baja de Ibaka es más importante, todavía, de lo que lo fue la de Westbrook el año pasado. Oklahoma encontró durante este año un 'mini-Westbrook' en Reggie Jackson y podría no sufrir tanto sin él como lo hará sin Ibaka. Y eso que Westbrook es una estrella de la liga y, junto a LeBron, el mejor jugador de estos Playoffs. Pero en cuanto a juego, posibilidades y sustitutos la baja de Ibaka daña mucho más a los Thunder. No hay otro como él en el equipo. Ni parecido. ¿Qué pueden hacer?
La opción más clara, a priori, sería colocar a Kevin Durant de ‘4’, incluir a Caron Butler como titular y abusar de ese ‘small-ball’ que tan buenos resultados le ha dado a los Thunder esta temporada. Es lo que se rumorea por los medios estadounidenses pero hasta esta noche no saldremos de dudas. ¿El problema? Ese ‘small-ball’ salía bien con un hombre tan intimidador como Ibaka en la pintura. Sin él tendrá que aparecer la figura de Perkins o Steven Adams. El ex de los Celtics ha dado ‘chispazos’ contra los Clippers pero sigue siendo un pívot lento únicamente aprovechable en el poste. No como intimidador. Ahí surge el novato neozelandés. Adams ha sabido aprovechar sus minutos y su energía ha ‘lanzado’ a los Thunder en muchos partidos. Tapona, rebotea y, sobre todo, intimida. No es Roy Hibbert, pero es lo mejor que le queda a Oklahoma en la pintura.
Todo esto parece muy fácil si no tenemos en cuenta que enfrente están los San Antonio Spurs. Posiblemente el equipo que mejor baloncesto ha desplegado este año y una máquina milimétricamente dirigida desde el banquillo por el mejor entrenador de la liga: Gregg Popovich. Tony Parker parece haber superado sus problemas físicos y están todos listos para volver a ganar el anillo. Contra los Thunder es de suponer que Popovich volverá a mezclar el ‘small-ball’ (Duncan y 4 pequeños) y un quinteto con la pareja de pívots, con la superioridad que le daría tener dos hombres grandes en la pintura. La pareja Duncan-Splitter funcionó contra los Blazers y podría hacer mucho daño a Oklahoma. En ese triángulo (Parker y los dos pívots) reside la ventaja ‘texana’ al no estar Ibaka.
Si Durant juega de ‘4’ con un único interior en la pintura pendiente de Duncan y Splitter, las penetraciones de Parker serán mucho más sencillas. Con Ibaka como centro del ‘small-ball’ el francés lo tendría (un poco) más complicado. Sin él adquiere todavía más importancia la defensa de los exteriores sobre el base. Sefolosha, Westbrook y Jackson hicieron un buen trabajo en ciertos momentos parando a Chris Paul y necesitan ser aún más agresivos con Parker. Si Popovich tira de los dos pívots obligará a Scott Brooks a castigar a Durant en defensa o, por el contrario, a jugar con dos ‘grandes’ como Nick Collison y Steven Adams, o Perkins. Los dos primeros fueron muy importantes en el sexto encuentro contra los Clippers cuando Ibaka se lesionó y eso liberaría más a Durant en defensa. Clave.
Porque todo lo escrito sobre la defensa de los Thunder y la ausencia de Ibaka se queda en nada si tienen una mala noche en el tiro. Necesitan, como siempre, a Westbrook y a Durant, el primero está en su mejor momento y el segundo es el MVP, pero también, y más que nunca, necesitarán la aportación de Reggie Jackson y Caron Butler. Ese ‘tercer hombre’ que lidere la segunda unidad y sin el que es imposible que ganen o luchen la serie. Los Spurs son un equipo con estrellas, sí, pero un equipo, y su segunda unidad (Ginóbili, Belinelli, Danny Green, Diaw…) ha decantado ya varios partidos en estos Playoffs. Por plantilla es muy superior a estos Thunder y Popovich tiene el ‘don’ de hacer rendir a casi cualquier jugador en cualquier momento.
El ejemplo Dallas. San Antonio abusó de los Blazers pero sufrió, y mucho, contra los Mavericks en primera ronda. Perdieron 13,7 balones por partido ante Dallas, por los 9,4 en la serie con Portland. Los de Carlisle fueron mucho más intensos en defensa y corrieron, algo que hace daño a los Spurs y algo que gusta en Oklahoma, que suele atascarse en el ataque en estático cuando no tiene acierto en el tiro exterior.
Son algunas claves, pinceladas de lo que a priori iba a ser una serie igualada y que esperemos dure muchos partidos. Si los Thunder consiguen solventar, sobre todo en defensa, la baja de Ibaka, tendremos serie. Sino, volveremos a ver a Popovich y compañía en la final.
PRONÓSTICO: San Antonio Spurs 4 – 2 Oklahoma City Thunder