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INFORME

Mundos distintos: el Oeste agranda la brecha con el Este

En las últimas quince temporadas el octavo del Oeste siempre ha sumado más victorias que el del Este. De media, 45'5 por 39'7. Y las diferencias siguen yendo a más.

Mundos distintos: el Oeste agranda la brecha con el Este
JONATHAN DANIELAFP

Datos sin cocinar. Los equipos de la Conferencia Este han ganado en lo que va de temporada 426 partidos. Los de la Oeste, 528. En duelos directos, los equipos del Este han ganado a los del Oeste 139 partidos. Los del Oeste a los del Este, 238. Sólo cuatro equipos del Este tienen balance ganador contra el Oeste: Indiana Pacers (17-10), Miami Heat (17-6), Toronto Raptors (13-12) y Brooklyn Nets (14-11). Y viceversa: sólo cuatro equipos del Oeste lo tienen perdedor contra el Este: Denver Nuggets (12-13), Los Angeles Lakers (10-16), Sacramento Kings (10-15) y Utah Jazz (11-16).

Ahora mismo, la frontera de playoffs del Este la marca Atlanta Hawks con un balance de 27-35. La del Oeste, Dallas Mavericks en 38-27. Phoenix Suns (36-27), ahora mismo fuera de playoffs, sería tercero en el Este sólo por detrás de Indiana y Miami y por delante de Toronto Raptors (35-27). Más: el undécimo y el duodécimo del Oeste, Denver Nuggets (27-36) y New Orleans Pelicans (26-37), estarían de lleno en la pelea por entrar en playoffs en una Conferencia Este especialmente depauperada a la espalda de Pacers y Heat. No es novedad, sólo la radicalización de una dinámica en absoluto coyuntural: el Oeste es más poderoso que el Este. El asunto ha estado años susurrando en el oído de David Stern como lo hará ahora en el de Adam Silver. Se sugieren cambios que van de pequeñas modificaciones a grandes revoluciones. Se cuestiona el papel de las Divisiones, cruciales en la NFL pero que en la NBA no tienen ya más función que entregar tres de las cuatro cabezas de serie de cada Conferencia para la primera ronda de los playoffs. De entre todas las ideas, algunas brillantes y otras sencillamente peregrinas, intriga especialmente la que apunta a mantener (o no) el actual sistema Este-Oeste de cara a la estructura y calendario de la Regular Season pero convertir los playoffs en una lucha abierta de los 16 mejores equipos de la NBA sin importar la Conferencia. Ahora mismo, por ejemplo, tendríamos estos equipos clasificados:

1. San Antonio Spurs (47-16)

2. Oklahoma City Thunder (47-17)

3. Indiana Pacers (47-17)

4. Miami Heat (44-17)

5. Los Angeles Clippers (45-20)

6. Houston Rockets (44-20)

7. Portland Trail Blazers (42-22)

8. Golden State Warriors (41-24)

9. Memphis Grizzlies (37-26)

10. Dallas Mavericks (38-27)

11. Phoenix Suns (36-27)

12. Toronto Raptors (35-27)

13. Chicago Bulls (35-29)

14. Washington Wizards (33-30)

15. Brooklyn Nets (32-30)

16. Minnesota Timberwolves (32-31)

Y, por lo tanto, un cuadro de eliminatorias así:

San Antonio Spurs (cabeza de serie número 1) –  Minnesota Timberwolves (16)

Golden State Warriors (8) – Memphis Grizzlies (9)

Miami Heat (4) – Chicago Bulls (13)

Los Angeles Clippers (5) – Toronto Raptors (12)

Oklahoma City Thunder (2) – Brooklyn Nets (15)

Portland Trail Blazers (7) – Dallas Mavericks (10)

Indiana Pacers (3) – Washington Wizards (14)

Houston Rockets (6) – Phoenix Suns (11)

Serían unos playoffs con todos los equipos por encima del 50% de triunfos. Pero serían unos playoffs con diez equipos del Oeste y seis del Este. Y hubiera sido así en cualquiera de los últimos años. Si se profundiza en las cifras, el resultado es demoledor: en los últimos 15 años siempre ha sido notablemente más fuerte la Conferencia Oeste. De hecho, los últimos años en los que los equipos de playoffs del Este tuvieron mejores balances que los del Oeste fueron los del segunto threepeat de los Bulls de Michael Jordan y Phil Jackson. En esos tres años y de forma consecutiva el octavo equipo del Este fue mejor que el del Oeste: en la 1995/96, 42-40 de Miami Heat por 39-43 de Sacramento Kings. En la 96/97, en la que más pronunciada es la tendencia analizando a los ocho equipos de playoffs, 44-38 de Washington Bullets por 36-46 de los Clippers. Y en la siguiente, 97/98, 43-39 de New Jersey Nets por el 41-41 de Houston Rockets. Y ya en ese año la situación real da ventaja al Oeste si se mira, por ejemplo, que Charlotte Hornets fue cuarto del Este con 51 victorias mientras que en el Oeste lo fueron los Suns con 56, las mismas que dieron el quinto puesto a los Spurs.

Desde entonces, quince temporadas completas han pasado, siempre ha sido más caro ser octavo del Oeste, sin excepciones y si dejamos a un lado la anomalía de calendario que implican las dos temporadas de lockout. En la primera, 1998/99 cada equipo jugó 50 partidos y los Knicks fueron octavos del Este con 27-23, dos triunfos más que Minnesota Timberwolves, octavo del Oeste con 25-25. En la 2011/12 y con 66 partidos por equipo, los mejores se igualaron (Spurs y Bulls, 50-16) y los octavos también (Utah Jazz 36-30, Philadelphia 76ers 35-31).

En las otras trece temporadas, catorce cuando termine la actual, el dominio del Oeste es abrumador. La media de victorias que se ha necesitado para ser octavo del Oeste y entrar en playoffs ha sido de 45'5. En el Este, de 39'7. En la Conferencia Oeste el último en eliminatorias siempre ha llegado superando el 50% de victorias en Regular Season, y la marca más baja es el 42-40 de Golden State Warriors en la temporada 2006/07. Y curiosamente ese año provocaron uno de los grandes terremotos de la historia de los playoffs al eliminar en primera ronda a unos Dallas Mavericks que venían de perder la anterior final ante Miami Heat y de firmar una campaña extraordinaria: 67-15. Un muy, muy salvaje Oeste…

La Conferencia Este ni aguanta la comparación en estos tres lustros. En las trece temporadas de calendario completo, el octavo clasificado ha estado siete veces por debajo del 50% de victorias y sólo cuatro por encima con dos temporadas de 41-41 exacto. Y en cinco de las últimas nueve temporadas, el octavo ni siquiera ha llegado a las 40 victorias, con fondo en las 36 de los Celtics en la 2003/04 y las 37 de los Hawks en la 2007/08 y los Pacers de la 2010/11, un triunfo menos que los 38 con los que se metió Milwaukee la pasada temporada para ser barrido, 4-0, por Miami Heat en primera ronda de playoffs.

Estos datos reflejan, claro, la situación media de cada Conferencia y no son obstáculo para que los mejores equipos del Este hayan sido tan potentes o más que sus vecinos del Oeste, del mismo modo que sucede este año con Indiana y Miami Heat. Pero en títulos y en los quince años en los que se centra este análisis, el Oeste también domina por 10-5 gracias a cinco de los Lakers y cuatro de los Spurs. El décimo es el de Dallas Mavericks a los que han seguido los dos ganados por LeBron James en Miami. El alero es de hecho y por sí mismo uno de los pilares del equilibrio de poder en la elite: en las 13 Temporadas Regulares completas, el equipo con mejor balance ha sido siete veces del Este por seis del Oeste. Tres llevan la firma de LeBron: dos con los Cavaliers y la pasada con Miami.

Otro dato que hace referencia a la concentración de estrellas, aunque conviene recogerlo con alfileres porque son todos los que están pero no están todos los que son: los integrantes del Mejor Quinteto de cada temporada. Quince años, 75 jugadores y 46 del Oeste por 29 del Este. Con plenos del Oeste en la 2006/07 (Nash, Bryant, Nowitzki, Duncan y Stoudemire) y en la 1999/2000 (Kidd, Payton, Garnett, Duncan y Shaquille O'Neal). El Oeste: mayor concentración de potencia de fuego, más polvo de estrellas.

Más significativo resulta el hecho de que en once de las trece temporadas que centran el núcleo de este análisis el octavo del Oeste ha sumado 44 o más victorias, con dos temporadas brutales en las que se llegó a la cola de los playoffs con 50 (50-32): Denver Nuggets en la 2007/08 y Oklahoma City Thunder en la 2009/2010. Sólo en el primer lockout, 25-25 los Timberwolves, el octavo ha estado en el 50%. Después, siempre por encima. En el Este, en cambio, el acceso a playoffs es casi gratuito en una evolución que además agranda las diferencias: en las últimas cinco temporadas completas, sin contar la del cierre patronal en la 2011/12, el octavo del Oeste ha conseguido una media de 9,4 victorias más que el octavo del Este. La temporada pasada, siete de diferencia entre Houston (45) y Milwaukee (38). En la 2007/08, abismal, trece: 50-32 Denver, 37-45 Atlanta Hawks. En la actual y ahora mismo, once. Seguramente acabarán siendo más.

De esta forma, claro, equipos de nivel suelen quedarse fuera de los playoffs en el Oeste mientras que en el Este suele llegar más carne de cañón a primera ronda. Y de ahí opciones que se plantean cada cierto tiempo como la de clasificar a los 16 mejores en base a un balance puro de triunfos. El año pasado, Milwaukee entró con esas 38 victorias, el décimo del Oeste seguía en el 50%: Dallas Mavericks, 41-41. En los playoffs de 2011 se clasificó en el Este con 37 triunfos mientras que en el Oeste el undécimo, Utah Jazz, sumó 39. Contra eso no hay maquillaje de los grandes equipos que valga: en la 2007/08 los Celtics fueron el mejor equipo de la Regular Season con nueve triunfos más que el mejor del Oeste, los Lakers. Sin embargo, el undécimo del Oeste, Sacramento, hubiera entrado otra vez en los playoffs del Este con 38 victorias por las 37 de Atlanta Hawks. Los Warriors se quedaron fuera ese año, novenos, con 48 triunfos. Cleveland había sido cuarto en el Este con 45. Diferencias abismales que son especialmente profundas en temporadas como la 2003/04, en la que había siete triunfos de diferencia favorables al octavo del Oeste con respecto al del Este… y 13 entre los cuartos. 55-27 Sacramento Kings, 42-40 Miami Heat. Y unas diferencias que no habrán hecho más que aumentar cuando se cierre la Regular Season el próximo 16 de abril.