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La ACB anuncia la ruptura definitiva
El acuerdo entre la Asociación de Clubes (ACB), la Federación Española (FEB) y la Asociación de Baloncestistas (ABP) para la definición de un nuevo marco de contratación de jugadores en la liga española no fue posible y la ACB anunciaba ayer la ruptura definitiva de negociaciones con la ABP y el mantenimiento del actual marco de contratación.
Según Esther Queraltó, secretaria general de la ACB: "No entendemos la postura inmovilista de la ABP que ha impedido definir un nuevo marco de contratación de jugadores extranjeros que pretendía situar a los clubes españoles en situación equiparable al marco de las competiciones FIBA y Euroliga. Con su postura inmovilista -concretó- la ABP ha bloqueado el acuerdo consensuado entre la ACB y la Federación con una actitud irresponsable que perjudica al baloncesto español y, por este motivo, la ACB ha dado por concluidas las negociaciones con el sindicato de jugadores".
El acuerdo consensuado entre la ACB y la Federación era de seis jugadores españoles o formados en España, tres jugadores europeos y dos extracomunitarios, respetando siempre los contratos que ya estuvieran suscritos en este momento según la normativa en vigor en este momento. El marco actual, que regirá también la próxima temporada, contempla que los clubes podrán alinear dos jugadores extranjeros y un número ilimitado de comunitarios procedentes de los quince países de la Unión Europea.
Queraltó aseguró que "la ACB no renunciará al marco europeo de libre circulación como en el resto de ligas europeas y lamentó que la propuesta de la ABP (siete jugadores españoles como mínimo, dos europeos y dos extranjeros) se haya mostrado inamovible desde el primer día".
Josep Senespleada, asesor jurídico de la ACB, fue aún más contundente indicando que "quien ha perdido ha sido el baloncesto en general" y puntualizó: "España está situada en el tratamiento actual europeo al nivel de Luxemburgo o Irlanda, por debajo de Francia, Italia o Alemania (donde sí hay libre circulación de europeos)".
Por su parte, José Luis Llorente (presidente del sindicato de jugadores) se defendió de los ataques: "Los que perjudican al baloncesto son los clubes. No me explico cómo pueden decir que beneficias al jugador español o a la selección con cinco extranjeros".