CON YARDAS Y A LO LOCO

CÓDIGO #CA

Love no va a triunfar y lo de Rodgers no se va a arreglar

Love no va a triunfar y lo de Rodgers no se va a arreglar. Todo va a salir mal. Seremos peores que los Bears y, quizás, más malos que los Lions. Qué duro todo y más con las dos últimas temporadas que los Packers han realizado. Estar de los primeros en la fila para lograr el título a, de repente, pasar a ser el último de la cola, como cuando te quedas a las puertas de tu festival soñado porque tu entrada, comprada en la reventa, es falsa.

Volviendo a ese joven quaterback del que tantísimo se ha hablado, tantísimo se está hablando y tantísimo se hablará con la friolera de cero minutos sobre el terreno de juego, cómo va a triunfar alguien con el escrutinio mediático al que se le está sometiendo. Pensadlo, es casi imposible. Y digo casi porque en la NFL se ha visto de todo pero, en lo más profundo de mi corazón quesero, sé que es inaguantable. Si Love lo hace bien, se pondrá el foco, todavía más, sobre un Aaron Rodgers que no olvidemos que es leyenda viva de Lambeau y ser el 'culpable' de algo tan serio siempre trastoca. A mí que no me engañen. Pero, ¿y si lo hace mal? Ay si lo hace mal. Los Packers, franquicia abrazada al éxito las últimas temporadas, campeará por los caminos de la indiferencia por culpa de Gute, quien seleccionó al mariscal hace dos años ya, e indirectamente de Love. Marcado para toda su vida profesional. A ver quién es el listo que aguanta toda esa presión.

Jordan Love con Matt LaFleur, Head Coach de los Green Bay Packers. AFP

Ahora hablemos de su nivel futbolístico. Esto debería ser lo más importante y parece estar quedando en segundo plano. Digamos que el nivel de Love en los entrenamientos pretemporada está siendo cuánto menos dudoso para un equipo que quiere y debe ser candidato al Lombardi. Según los insiders que cubren al equipo de Green Bay, Love intercambia buenos drives con algunos lanzamientos 'sospechosillos'. Todo un poco mediocre después de pasarse una campaña formándose bajo la tutela del equipo de coaches de Matt LaFleur. Otra cuestión a tener en cuenta es cómo llevarán los Davante Adams y compañía, recibir pases de un Love con problemas después de haberlos recibido de un Rodgers MVP, si es que al final se consuma el hold-out absoluto por parte del doce quesero. Como pasar de comer foie de pato a paté La Piara, está feo y no se lleva bien.

De la guerra para nada fría entre Rodgers y la gerencia no hay mucho de lo que hablar. Respecto a este tema, salgan de aquí que quiero estar solo.

Sólo quedará sufrir en esta temporada compañero quesero. Sólo se podrá pensar que tiempos pasados siempre fueron mejores incluso los de Mike McCarthy... Sudores fríos. Sólo queda activar el 'contragafe' y sentarse a esperar que el ovoide salga del center de turno.