Una ballena está atrapada en el Sena
La presencia de manchas en su cuerpo se debe al hecho de estar viviendo en agua dulce desde hace tiempo. El animal continúa sin apetito a pesar de los diversos intentos de suministrarle vitaminas.
El estado de salud de la beluga que se encuentra perdida y desnutrida en el río Sena preocupa. Y mucho. Hay pocas esperanzas de que la ballena recupere el apetito y, además, muestra signos de enfermedad desde que fue avistada el pasado martes. En la actualidad, se encuentra a unos 70 kilómetros al noroeste de Paris.
Las autoridades francesas y las ONG siguen esforzándose para rescatar a la ballena tras su remontada al río, un hecho insólito que pone en peligro la vida del animal. La gerente de Sea Shepherd (la ONG de defensa de los océanos presente en el lugar), Lamya Essemlali, ha asegurado que salvar a la beluga es “un desafío” con “pocas esperanzas” de éxito debido a la falta de apetito del animal.
24 y 28 horas de vida
Según los expertos, a esta le quedan entre 24 y 48 horas de vida. Y es que es muy arriesgado sacar a la beluga del agua, debido a que ella no puede llegar al océano sola y está absolutamente desorientada.
Los primeros intentos de alimentar a la ballena con arenques muertos y truchas vivas no habían surtido efecto y el sábado se ejecutó otra alternativa: “Administrarle vitaminas por un veterinario mediante una flecha”, exhibió la secretaria general de la prefectura de Eure (Normandía), Isabell Dorliat Pouzet.
Prescripciones para evitar que el cetáceo perezca
Entre las prescripciones para evitar que el cetáceo perezca, manifiestan la reapertura de una esclusa hacia el mar, a 160 kilómetros, para que pueda reanudar su camino o conservarlo en la cuenca “para que recupere el apetito”. Cualquier decisión será tomada pensando en el “interés del animal” y hasta el momento no ha tomado ninguna, puesto que se esperan análisis, señaló Essemlali.
Los científicos también han asegurado que la presencia de manchas en su cuerpo se debe al hecho de estar viviendo en agua dulce desde hace días. A diferencia de otros cetáceos, es capaz de sobrevivir más tiempo en aguas dulces porque se trata de un animal que vive en las frías aguas del norte, donde la salinidad es más baja de lo normal y su cuerpo está acostumbrado.
La eutanasia
A pesar de ello, no puede seguir demasiado tiempo entre las dos esclusas o presas donde se encuentra porque el agua está estancada y caliente, lo que puede hacer que muera en pocas horas. Por este motivo, se ha barajado la opción de que, dado el estrés de la beluga, lo más compasivo es que deje de sufrir, la eutanasia.
Aunque se niega a comer, para los responsables del operativo de salvamento, la eutanasia sería una decisión “prematura” porque según la responsable de Sea Sea Shepherd “todavía tiene en vigor un comportamiento curioso, ya que gira la cabeza y reacciona a los estímulos”.
A día de hoy, el equipo liderado por Essemlali lucha para evitar que la beluga corra el mismo destino que una orca que hace apenas seis semanas, fue hallada inerte en el Sena, en un paraje solitario entre Rouen y Le Havre.