¿Por qué el escrutinio en Madrid empieza mejor para el bloque de izquierdas y cómo afecta el avance del recuento?
Las últimas elecciones en la Comunidad de Madrid invitan a pensar que los partidos de izquierda comenzarán con fuerza, si bien las derechas irrumpen con el avance del escrutinio.
Este domingo millones de españoles han estado llamados a las urnas para decidir a los alcaldes de sus municipios y, en algunos casos, a sus representantes a nivel de comunidad autónoma. Uno de estos territorios es la Comunidad de Madrid, donde la actual presidenta, Isabel Díaz Ayuso, se presenta para buscar la reelección. Como ‘contrincantes’, Mónica García (Más Madrid), Juan Lobato (PSOE), Rocío Monasterio (Vox), Alejandra Jacinto (Unidas Podemos) y Aruca Gómez (Ciudadanos).
En la región madrileña la participación, a las 14:00 horas de la tarde, era de un 38,82%, algo por encima respecto a los comicios de 2019. Las encuestas recientes calculan que, en general, podría acudir a las urnas cerca de un 68% de la población con derecho a voto (algo ligeramente por encima de lo habitual en unas elecciones autonómicas).
Durante la campaña se ha repetido que una afluencia masiva en las votaciones podría beneficiar a los partidos de izquierdas. Y es que, como señala El País, los barrios con rentas medias y bajas suelen votar menos y, normalmente, lo hacen por la izquierda. Por lo general, en los últimos años, el recuento suele empezar mejor para los bloques de izquierda.
Con un ojo en el 50% del escrutinio
En las elecciones más recientes se ha repetido un mismo patrón: los partidos de izquierdas suelen empezar bien, pero al avanzar el escrutinio de los votos las derechas empiezan a subir. Si bien es no es algo matemático, sí que ha ocurrido tanto en los comicios de 2019 como en los de 2015. En cualquier caso, es más importante fijarse en la tendencia que en un punto concreto del escrutinio.
Si un partido empieza a ganar escaños cuando el recuento apenas va entre un 10% y el 20%, lo normal es que siga subiendo conforme avance el escrutinio. Además, es habitual que las cifras bailen antes de alcanzar el 50% de los votos escrutados. Tras ello, puede haber movimiento hasta que se llega al 80% del escrutinio.