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Nuevo hallazgo sobre el megalodón: comía una orca en cinco bocados

Un fósil excepcionalmente conservado ha revelado que su mandíbula le permitía ingerir una orca de 8 metros en apenas 5 bocados.

El megalodón, el tiburón más grande que jamás haya existido, tuvo que satisfacer un requerimiento energético diario de más de 98.000 kilocalorías.
J. J. GIRALDO
Sebastian CarrascoJ. J. GIRALDO

Una recreación 3D de un espécimen fósil excepcionalmente conservado de megalodón, el tiburón más grande que jamás haya existido, ha revelado que era más grande, rápido y voraz de lo que apuntaban las estimaciones efectuadas hasta ahora.

Una investigación publicada por la revista científica ‘Science Advances’ sugiere que este escualo medía 15,9 metros de largo y pesaba 61,560 toneladas. Su tamaño exacto era una incógnita hasta el momento debido a que su esqueleto está compuesto de cartílagos que rara vez se fosilizan.

Sus dimensiones han sido calculadas con base a sus dientes y al esqueleto de un gran tiburón blanco, su análogo vivo más cercano, y esas 61,560 toneladas son un 23% más que las estimadas anteriormente.

No obstante, según recoge el diario The New York Times, hay vértebras fosilizadas que son un 50% más grandes que las utilizadas para el modelo, lo que insinúa un tamaño máximo de casi 20 metros, superior al de una ballena jorobada actual.

Podía comerse una orca en 5 bocados

Además, el estudio, realizado en colaboración con la Universidad de Zúrich, señala que el megalodón tenía una velocidad de 1,4 metros por segundo (5 kilómetros por hora) y que su mandíbula le permitía ingerir una orca de 8 metros en apenas 5 bocados.

Este animal necesitaba 98.175 kilocalorías al día, una cantidad 20 veces mayor a la que requiere un tiburón blanco adulto. No obstante, en caso de alimentarse exclusivamente de sus mayores presas, podía requerir comer solo cada 145 días.

Su velocidad le permitía ir fácilmente a diferentes zonas de alimentación, una táctica de depredación también utilizada por el tiburón blanco para encontrar alimentos ricos en calorías.

El megalodón pobló los océanos 23 millones de años atrás y se extinguió hace unos tres millones. Su final fue atribuido a una reducción de los hábitats costeros de finales del Plioceno que probablemente resultó también en la desaparición de otras especies de megafauna marina que podrían haber sido sus presas.