La denuncia del ciclista Diego Rubio por el desayuno del hospital de Ávila
“Este es el desayuno de un paciente, no hay por donde cogerlo. ES UNA VERGÜENZA”, ha escrito en sus redes sociales junto a la publicación de una fotografía del desayuno.
El ciclista español Diego Rubio, el cual lleva varios meses de baja por una negligencia médica en una operación realizada en Estonia, ha compartido una publicación en redes sociales sobre el desayuno que sirvieron en un hospital público en Ávila. Esto ha despertado una gran polémica.
El corredor de Navaluenga, que finalmente no renovó con el equipo Burgos BH a finales de 2022, compartió una imagen en su cuenta personal de Twitter en la que muestra una taza de café junto a dos paquetes de galletas, una tarrina de mermelada y un contundente mensaje.
“Es una vergüenza”
“Hospital de Ávila, ahora mismo. Este es el desayuno de un paciente, no hay por donde cogerlo. ES UNA VERGÜENZA”, ha escrito el deportista denunciando este episodio de la alimentación, aunque ha asegurado que en este caso no era él la persona que estaba enferma.
Además, ha lanzado una pregunta interesante a los internautas: “¿Cuándo se va a dar importancia a la nutrición en la sanidad pública?”. Todas las respuestas han encontrado el mismo denominador común: faltan profesionales de la nutrición en los hospitales, es un problema que llevamos arrastrando muchísimos años.
Multitud de reacciones
Las reacciones que ha provocado el tuit van en dos direcciones. Unos a favor, que se unen a las críticas a este desayuno que se ha servido en este centró médico, y otros que restan importancia al asunto, argumentando que tampoco es para tanto.
Este deportista ha interactuado con absolutamente todos los usuarios de Twitter que le han respondido sobre lo publicado en su perfil. De hecho, ha compartido su opinión hasta con aquellas personas que le han criticado duramente y le han acusado de no saber qué es un desayuno bueno.
Historia de superación
Rubio tiene una gran historia de superación. En el mes de mayo del año pasado todo se torció tras caer al suelo en el Tour de Estonia, después de varias lesiones e incluso sufrir un atropello. En este mismo lugar fue operado del brazo en una intervención que se convirtió en su peor pesadilla meses más tarde.
En una entrevista recienta con El Mundo, este transmitió este calvario de la siguiente manera: “Fue una negligencia que me destrozó la vida. Los médicos, con cuatro o cinco opiniones, me decían que estaba bien. Pero me miraba el brazo y decía... ‘esto no pude estar bien”. Este pelará por volver, pero en caso de no hacerlo, tiene otras alternativas para su futuro.