Cuidándote desde dentro

1.- Alimentación

Como vimos anteriormente, conviene mantener una dieta rica en betacarotenos, vitamina E y vitamina C, que estimulan y favorecen la secreción de melanina en tu piel, que es la causante del bronceado al reaccionar con el sol.

Los alimentos ricos en betacarotenos son los tomates, zanahorias, pimientos rojos, espinacas, frutas como el mango, la sandía, melocotón, kiwi ... Puedes tomarlos enteros, en ensaladas o prepararte unos buenos gazpachos y zumos según tus preferencias.

Consulta también cómo incorporar antioxidantes a tu dieta.

2.- Hidratación

Es fundamental manetener las células de tu piel bien hidratadas para evitar el envejecimiento prematuro causado por las radiaciones solares. Bebe agua con frecuencia y te notarás más ligero y con una piel más tersa y radiante. No caben excusas. Aunque la mayoría de los alimentos que ingerimos contienen agua, manten la disciplina y no dejes de beber agua.

Actúa desde fuera

3.- Protección solar

Tomar el sol de una forma responsable ayuda a estimular nuestras defensas, nos aporta bienestar y por tanto, belleza.

Evita las quemaduras solares y protégete de las radiaciones del sol, que acaban deteriorando las células de tu piel y pueden ocasionarte lesiones leves como la deshidratación y el envejecimiento celular prematuro, o incluso lesiones más graves e irreparables.

4.- Reparación post exposición

Es muy importante usar cremas o lociones aftersun después de tomar el sol. Algunas incorporan ingredientes naturales, como el aloe vera, que facilita la regeneración de las células que se hayan dañado por el efecto de la exposición solar.

5.- Rayos UVA

Los rayos UVA se pueden emplear para mantener y prolongar el bronceado y también como terapia de preparación de tu piel antes de exponerla al sol. Algunas pieles fotosensibles agradecen una exposición paulatina a los rayos UVA, antes de exponerse directamente al sol del verano.

6.- Exfoliación

Aunque existe la creencia de que al exfoliar nuestra piel perdemos bronceado, lo cierto es que a la larga nuestra piel lo agradece, pues ayuda a eliminar las células muertas dando paso a nuevas células y facilita el trabajo de la melanina.

7.- Hidratación

Una vez más debes tener en cuenta la importancia de una buena hidratación de tu piel.
Sigue nuestros consejos sobre cuidados básico de tu piel y elige una buena crema hidratante que penetre en las capas donde tu piel más lo necesita.

8.- Cremas autobronceadoras

Las cremas y lociones autobronceadoras que encontrarás hoy en día, han sido perfeccionadas para ofrecer un color más natural y alejado de aquellos tonos amarillentos artificiales.

Su principal ingrediente es la dihidroxiacetona (DHA), que se extrae de la caña de azúcar y actúa directamente sobre la superficie de nuestra piel, ofreciémdonos una pigmentación uniforme y muy similar a la de la melanina.

Un consejo, aplícate el autobronceador antes de la exfoliación y siempre con la piel bien hidratada.