Italia se extraña de las críticas a Benítez por ser defensivo
Allí tenía fama de tomar pocas precauciones en la zaga y recuerdan que en su última temporada con el Nápoles encajó 54 goles en 38 partidos de Serie A.
Los futboleros italianos que este lunes leyeron los comentarios sobre el empate del Real Madrid están alucinando. Benítez situado en el foco de la polémica por amarrategui, defensivo, rácano, especulador... ¿Pero de quién estamos hablando? En sus dos temporadas napolitanas el técnico fue muy criticado por su actitud demasiado ofensiva, según algunos “zemaniana”, por su falta de equilibrio, por la poca flexibilidad en el uso de un esquema, el 4-2-3-1, que con cuatro delanteros para muchos era un suicidio en la Liga italiana.
Los números, de hecho, demuestran que el talón de Aquiles del equipo azzurro con el español fue la zaga: en su segunda temporada (donde pesó, y mucho, la ausencia de Pepe Reina), los partenopei encajaron 54 goles en 38 partidos de la Serie A, 15 más que en el 2013/14. Un defecto que hizo describir al entrenador como 'poco apto para el fútbol italiano', donde quien gana es él que menos goles encaja. El ataque napolitano, sin embargo, con Benítez fue el mejor de toda la historia del club, con 104 goles marcados por curso en todas las competiciones.
En mayo, cuando en la sala de prensa de Castel Volturno aparecieron periodistas, desde toda España, preguntando a sus compañeros italianos por la racanería del futuro entrenador merengue, nadie se lo podía creer. No obstante, nada más tocar el suelo madrileño Benítez volvió a ser un maestro de la defensa con apenas dos goles encajados en nueve partidos oficiales y, otra vez, críticas por su táctica demasiado conservativa.
¿Dónde está, entonces, el verdadero Benítez? Probablemente en sus ideas. En el Nápoles, cuya mayoría de talentos pertenecía a la delantera, decidió plantear un equipo ofensivo. Con el Madrid, que abunda de cracks en cualquier sector del campo, puede ofrecer un once más equilibrado. La contraindicación, entrenando a los merengues, es que sin dar espectáculo la polémica siempre está a la vuelta de la esquina. El tiempo, los resultados y los títulos dirán quién lleva razón.