Un turista británico recupera su dentadura postiza perdida en España 11 años después
Paul Bishop ha vuelto a reencontrarse con sus dientes después de que se perdiesen en un contenedor de basura en Benidorm: “Habían encontrado mi ADN”.
España resulta ser uno de los destinos favoritos para el turismo internacional, sobre todo en verano, donde el clima, la comida y las playas se convierten en uno de los grandes atractivos a la hora de emprender un viaje, solo que a veces no todo sale como esperan.
Uno de los lugares con más turismo en España es Benidorm, que recibe en verano la visita de millones de personas que buscan ese turismo de ‘sol y playa’ acompañado de buena comida, y la ciudad alicantina ofrece todo ello, además de fiesta.
Perdió su dentadura postiza en la basura
Paul Bishop, de 63 años, fue uno de esos turistas en desplazarse hasta Benidorm hace ya 11 años. Una visita que aprovechó para disfrutar y beber, y así lo hizo en un resort de fiesta, donde después de beber sidra “se enfermó” y acabó vomitando en un contenedor de basura. Y es que su viaje terminó, pero se dejó algo en la ciudad sin querer: su dentadura postiza.
Dicha dentadura fue encontrada en una basura, y las autoridades españolas buscaron exhaustivamente su dueño. Para ello, usaron registros de ADN, lo que les llevó hasta su casa, en Stalybridge, Greater Manchester, y tras reencontrarse con su dentadura postiza, Bishop ha admitido que se sintió “atónito”.
Desde la ‘BBC North West Tonight’ contactaron con el ciudadano británico, quien ha recordado aquella noche de hace 11 años como si fuese la de ayer: “Me había bebido el resto de mi sidra y acabé vomitando. La papelera era lo más cercano a mí. Cuando nos dirigimos al siguiente bar, mi amigo se volvió hacia mí y me preguntó dónde estaban mis dientes”.
Fue entonces cuando trató de buscar su dentadura postiza dentro de un contenedor, aunque sin suerte. Tras ver que estaban buscando al dueño de la dentadura, él “pensó que alguien le estaba gastando una broma”. “Lo siguiente que supe fue que habían encontrado mi ADN y mi dirección en los registros británicos y la han enviado por correo. Es increíble. Todos conocen mis famosos dientes... ¡Voy a tener que abrir un museo de dientes de Stalybridge!”, ha revelado.