Tania Medina habla de su trastorno alimenticio: “No me permitía ni un vaso de leche”
La exconcursante de ‘La isla de las tentaciones’ ha compartido con sus seguidores de Mtmad su complicada obsesión del pasado por tener un cuerpo perfecto.
Después de contar cuáles son sus planes de boda con Alejandro Nieto, Tania Medina ha querido compartir con sus seguidores de Mtmad el trastorno alimenticio que sufre desde hace varios años. La exconcursante de ‘La isla de las tentaciones 4′ ha reconocido que sufre un TCA y ha explicado cómo comenzó teniendo problemas con la comida desde que era adolescente.
Desde que era muy joven comenzó a obsesionarse con la alimentación y el peso, llegando a consumir solamente pollo y pepino en su dieta diaria, pero luego se daba grandes atracones de comida cuando nadie la veía. Cuando empezó a dedicarse a la moda, el trastorno alimenticio de Tania aumentó. Para intentar ayudar a los que estén pasando por una situación similar, la joven ha querido concienciar de la importancia de buscar ayuda profesional en un caso como el suyo.
Demasiada exigencia
“Siempre he tenido mucha exigencia conmigo misma en todos los aspectos de mi vida, todo lo quería hacer bien y llegó un momento en que me explotó todo. Recuerdo todo como una experiencia muy dura. Recuerdo ir a la cocina a comer de todo cuando mis padres y mi hermana estaban durmiendo. Comía aunque no me apetecía, era una pelea constante conmigo misma”, cuenta la canaria.
“Cuando me metí en los certámenes de belleza fue un caos para mí. Veía a mis compañeras que eran perfectas y a mí siempre me faltaba algo. Me marqué unas dietas súper estrictas. No me permitía ni un vaso de leche. Fue una época muy dura en la que yo me sentía una mierda. Sentía que no valía y la solución era comer poco. Yo en ese momento no estaba bien, era una niña joven. También es un poco culpa de la sociedad porque somos muy exigentes con los cánones”, añade.
A día de hoy
A día de hoy, Tania todavía no ha superado emocionalmente su enfermedad. Entre lágrimas, ha explicado cómo comenzó avanzar en su trastorno y a reconciliarse con la comida: “Un día de repente me di cuenta que lo había superado al aceptarme tal y como soy. A día de hoy no sigo ninguna dieta. Como saludable y si me apetece comerme un plato de macarrones o un donut, me lo como”, confiesa la canaria.
“Hoy en día estoy muy feliz con mi cuerpo. Me costaba muchísimo tener un cuerpo de modelo y me costaba mucho entender que nunca iba a alcanzar ese cuerpo por mi consitución. Eso es algo que a día de hoy sí entiendo. En su día no pedí ayuda profesional y hoy me arrepiento. Yo al final salí sola y con la ayuda de mi familia. Pero si pasáis por algo parecido os recomiendo que pidáis ayuda profesional porque no todo el mundo puede salir por sí mismo”, concluye para Mtmad.