Taberna Puerto Lagasca, el pequeño gran proyecto del canario Pepe Caldas
Un encantador restaurante en el corazón del barrio de Salamanca con una cocina honesta y de calidad a precios razonables.
El simpatiquísimo empresario de origen canario Pepe Caldas, siempre soñó con abrir su propio restaurante. Un hombre emprendedor, mal estudiante, pero muy buena gente. Un apasionado de la gastronomía, que logró hacer realidad su sueño con la apertura de Taberna Puerto Lagasca en plena crisis de 2008. Lo que para muchos era una locura, para Pepe fue una oportunidad. Su mente inquieta tuvo claro que, en esos complicados momentos, al exclusivo barrio de Salamanca le faltaba un restaurante donde se pudiera comer bien a precios razonables. Con esa premisa en mente y con la ayuda de su buen amigo Monchete, del restaurante Nájera, Pepe perfiló un coqueto restaurante en una de las mejores zonas de la capital, donde comer bien a muy buen precio.
En el número ochenta y uno de la madrileña calle de Lagasca, Caldas inauguró con mucho cariño Taberna Puerto Lagasca. Un restaurante que arrancó su andadura en un complicado momento para la economía española. Un modesto proyecto decorado en su mayoría con mobiliario de Ikea, demostrando la importancia del buen gusto.
En la actualidad, Taberna Puerto Lagasca cuenta con un público fiel, lo cual no es de extrañar, porque además de resultar sumamente acogedor, cuenta con un gran equipo de profesionales que nos hacen sentir siempre como en casa. En sala, la encantadora Camille con su precioso acento francés y su gran sonrisa, se desvive con cada cliente como el primer día. Al frente de los fogones, el incansable Paco Carrascosa Arévalo, no deja de sorprendernos con nuevos platos en cada visita. Un verdadero artista, apasionado de su profesión, que logra conquistar con sus excelentes elaboraciones a los paladares más exigentes.
En esta ocasión comenzamos como suele ser costumbre con sus típicas papas arrugadas con mojo picón. Un guiño a la tierra de Caldas, que acompañamos con unas originales croquetas de jamón y espinacas. Crujientes y humeantes, nos encantó su cremosidad y su delicado sabor. Seguimos con unas sensacionales alcachofas confitadas, que Paco pasa por la parrilla y acompaña con virutas de jamón ibérico. Absolutamente magníficas. Camille nos recomendó probar las setas salteadas con yema de huevo y resultó ser un acierto en toda regla. Un plato rotundo, sabroso y realmente delicioso que nos condujo a un formidable arroz con bogavante, que Paco borda a pesar de la dificultad del plato. El arroz estaba en su punto y repleto de sabor. Súper recomendable.
Para terminar, sucumbimos a los encantos de la mítica puertorrija, la versión que preparan en Taberna Puerto Lagasca de la clásica torrija. Un postre que nunca falla. Una delicia en toda regla. Taberna Puerto Lagasca, el pequeño gran proyecto gastronómico del carismático Pepe Caldas. Un restaurante que nunca defrauda. La mejor prueba de ello es que quien lo conoce ... siempre VUELVE.
TABERNA PUERTO LAGASCA
Dirección: Calle Lagasca, 81
Teléfono: 91 576 41 11
Web: https://puertolagasca.com/
Precio Medio: 30€