CINE

Qué fue del niño de ‘Charlie y la fábrica de chocolate’

Freddie Highmore ha continuado en la primera línea cinematográfica con papeles en diferentes filmes y series, destacando el de protagonista en ‘The good doctor’.

Actualizado a
Qué fue del niño de ‘Charlie y la fábrica de chocolate’

La claqueta mágica de Tim Burton hizo de la novela infantil de Roald Dahl un clásico instantáneo del cine. Charlie y la fábrica de chocolate marcó la infancia de muchos espectadores, retomando esa acidez humorística que la literatura británica del pasado siglo, heredera de la transgeneracional dickensiana, empleaba para criticar lo amargo de una sociedad. Tanto niños como adultos eran mostrados de forma truculenta, exponiendo los defectos antes que las virtudes —rozando en muchas ocasiones la incomodidad y la violencia—, ante los ojos de un pequeño afortunado que encontró el pasaje dorado a un mundo de ensueño industrial dentro del envoltorio de una tableta de chocolate.

Era 2005 y ahora ha vuelto a recordarse aquella historia protagonizada por Johnny Depp, quien hacía de Willy Wonka, por la precuela que acaba de estrenarse en la que Timothée Chalamet hace del carismático patrón. Los espectadores echarán de menos al pequeño Charlie, interpretado por Freddie Highmore. No obstante, lejos de convertirse en uno de esos actores que triunfan como niños auto-condenándose a un olvido prematuro, Highmore ha continuado presente en la industria, amén de importantes papeles tanto en la pequeña como en la gran pantalla.

Ampliar

Son y han sido tantas sus participaciones que muchos ya han olvidado que era él quien hacía de Charlie en el filme de Burton. Quizá su papel más reconocido sea el de Shaun Murphy, el joven cirujano con autismo y síndrome del sabio que protagoniza The Good Doctor. La historia de cómo este chico de infancia complicada pasa a formar parte del equipo del San José St. Bonaventure Hospital ha sido premiada y reconocida a lo largo y ancho del mundo, lo que, entre otras cosas, ha supuesto un salto de fama en la carrera de Highmore. Way Down o Las crónicas de Spiderwick son otros de sus trabajos más reconocidos.

Una especial relación con España

Aunque nació en Londres, el intérprete ha mostrado en múltiples ocasiones el amor que siente hacia España. De hecho, habla castellano muy fluidamente. El motivo por el que posee esta elocuencia se remonta a su época universitaria: estudió Filología Española y Árabe y hasta trabajó becado como traductor de textos en un bufete de abogados en Madrid. Aquellos meses en la ciudad castiza fueron agua bendita para su español.

Tanto fue así que Highmore pudo permitirse hace algunos años una pequeña chanza para justificar su buen manejo del idioma: el intérprete británico aseguró hablar así, e incluso apoyar a la selección española de Fútbol, porque su abuela era gallega. La broma llegó demasiado lejos justo en el momento en el que el alcalde de Zapateira, lugar que él eligió para dar coherencia a la invención, le nombró hijo adoptivo. Pero ni él era de allí, ni la fábrica de Wonka el paraíso que soñaba aquel muchacho indigente.

Normas