SEMANA SANTA

La ‘procesión de los borrachos’ en León: así es el ‘Entierro de Genarín’ de Semana Santa

Se trata una multitudinaria procesión pagana erigida sin embargo como uno de los símbolos de la Semana Santa leonesa.

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El 'Entierro de Genarín' de León.

No es una procesión al uso. Y desde luego nada tiene que ver con la liturgia religiosa -lo que le ha granjeado numerosos detractores- a la que están adscritas la inmensa mayoría de las procesiones de Semana Santa que durante estos días recorren las calles de ciudades y pueblos de toda la geografía española tras dos años en los que la pandemia ha marcado el paso.

Genarín es la más atípica procesión de la Semana Santa Leonesa. Festividad poética en honor a un viejo pellejero, borrachín y putero, que llenó de anécdotas y chascarrillos a la ciudad de León en los años 20, haciéndose merecedor de un recuerdo eterno a través de la mas surrealista y onírica de las procesiones de la Semana Santa Leonesa”, reza en la web de la Cofradía de Nuestro Padre Genarín. Y es que en León, todos los Jueves Santos, sobre las doce de la noche, sale de la Plaza del Grano, la procesión conocida como el ‘Entierro de Genarín’ en una verdadera oda a la incorrección y al disfrute de quienes participan de una fiesta con una historia nonagenaria.

El origen de esta procesión tiene su parte de mito y su parte de realidad puesto que popularmente se atribuye a un hecho luctuoso, la propia muerte de quien le da nombre. Y es que en la noche de Jueves Santo de 1929 el jornalero Genaro Blanco fallecía atropellado por un camión de la basura junto a las murallas de la ciudad de León, siendo encumbfrado a la categoría de mito desde entonces.

Sin embargo, su acta de defunción, que recoge elDiario, confirma que en realidad murió en Viernes Santo, a las once de la mañana. Y el camión de la basura no era tal, sino una camioneta de limpieza al servicio de municipio conducida por un joven de 19 años que acabaría siendo condenado a dos años de cárcel y 5.000 pesetas del año 1929 como indemnización a la familia del difunto.

Lamentablemente para los acólitos de Genarín, este año tampoco será posible celebrar el entierro de tan carismático personaje. La propia cofradía, en un comunicado compartido en sus redes sociales, explica los motivos. “Las funestas circunstancias sanitarias siguen obligando a mantener la precaución”, aseguran los responsables, sabedores de que en los últimos años la afluencia ha sido multitudinaria, entre 20.000 y 30.000 personas.

Unas ‘inoportunas’ obras en la zona de la muralla de León, por donde debe transitar la procesión, también han pesado en la decisión final de la cofradía, que espera que el año próximo el ‘Entierro de Genarín’ se pueda celebrar por todo lo alto.