TELEVISIÓN

La descarada proposición de ‘First Dates’ que salió mal

José, de 76 años, se pasó de explícito en su cita con Maribel y terminó por enfadarla hasta el punto de dejar el programa sin despedirse.

La descarada proposición de ‘First Dates’ que salió mal

“En la vida hay tres cosas que me gustan: viajar, la comida y el sexo”. Con esa frase de presentación llegó José, de 76 años, al plató de ‘First Dates’. Toda una declaración de intenciones que ya dejaba caer los derroteros por los que iba a circular su cita con una Maribel que buscaba prácticamente todo lo contrario.

La primera impresión de ambos fue positiva. “Está bien. Si hubiese tenido diez años menos sería mejor, pero está bien. Es atractiva”, resumió José delante de las cámaras. La reacción de Maribel no se emitió, posiblemente, porque su impresión de su cita fue cambiando radicalmente con el paso de los minutos.

Una llamada de teléfono que interrumpió la cena, las críticas a la comida “pija” que le habían servido en el restaurante y el hablar de sexo en el primer encuentro le permitieron a Maribel hacer una panorámica de José. “Saber estar es importante. No tiene clase, no tiene estilo. Siento mucho que el sexo sea su debilidad. Me parece muy bien, pero a mí que no me mire”, indicó.

José, por su parte, seguía con a su ritmo. “Tengo que tener una pareja que le guste el sexo, que sea un poco guarrilla. Eso es lo que me gusta, jugar mucho, el morbo y todo ese rollo”, prosiguió. Una prioridad que no estaba entre las cualidades preferidas en un hombre por Maribel. “Me gusta un señor, una persona con clase, un hombre que sepa estar con una mujer y que sepa lo que una mujer significa. Que tenga conmigo detalles y cubra mis caprichos”.

Cuando llegó el momento de decidir si querían seguir el camino juntos o por separado, los espectadores tenían clara la respuesta de ambos. José quiso, mientras que Maribel adornó su ‘no’ bajo el pretexto de empezar con una bonita amistad. Fue ahí cuando llegó una de las proposiciones más descaradas de la historia del formato. “Mira, soy tu lacayo y haré todo lo posible por ser tu rey. Así que, desde aquí hasta abajo te voy a comer el conejito para poder ser tu rey, mi amor. Que lo sepas”, le dijo. Maribel, espantada, huyó pidiendo que esa parte no se emitiera.

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