Donatella Versace reaparece irreconocible

Donatella Versace (69) era la inspiración hecha persona de su hermano Gianni, el diseñador italiano asesinado en 1997. Él siempre confesaba que ella era musa y la colocó en el foco de la moda. Tanto es así que la estética se volvió para ella una obsesión, especialmente el no envejecer. Y para ello ha recurrido desde muy joven a la cirugía estética.

Acostumbrados a verla con un pelo lacio claro que destacaba más si cabe sus exagerados rasgos, el domingo por la noche sorprendió a propios y extraños con una nueva cara cuando posó en el estreno del musical The Devil wears Padra con Elton John (71), autor de la partitura, David Furnish (62), esposo de este, Anne Wintour (75), la directora de revista en quien se inspiraría la obra, y Vanessa Williams (61), protagonista de esta.

Versace reapareció con nuevos retoques, totalmente irreconocible, pero lo cierto es que su nueva cara rezuma más naturalidad que la que hasta ahora lucía la dueña del emporio italiano del lujo.

Una mujer nueva

A sus casi 70 años, Donatella Versace, sin su manido maquillaje ahumado en los ojos, y con un corte de pelo mucho más natural y menos pulido, tiene una imagen más fresca y rejuvenecida. Apenas se aprecian rasgos de la anterior cara en su rostro.

Se podría decir que con estos nuevos retoques la hermana de Gianni Versace ha dicho adiós a la que muchos consideraban la imagen de una figura de cera, por sus implantes y la ingente cantidad de bótox que se infiltró para frenar el paso del tiempo.

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