REDES SOCIALES
El valioso consejo de Ana Rosa Quintana a Marta Riesco
La periodista revela en sus redes sociales sus planes de ser madre y de congelar óvulos tras las palabras de la presentadora: “Me cogió por el pasillo y...”.
Marta Riesco ha sabido sacar la máxima rentabilidad a sus redes sociales tras su salida de Telecinco. A la espera del juicio contra Unicorn Content, la productora propiedad de Ana Rosa Quintana y Xelo Montesinos, por supuesto despido improcedente, la periodista vive de los ingresos que obtiene gracias a sus más de 191.000 seguidores en Instagram. Y es precisamente en esta plataforma donde ha dado a conocer su proyecto más especial: el de convertirse en madre, con pareja o sin ella.
Tras su polémica ruptura con Antonio David Flores, la también influencer, de 35 años, no piensa renunciar a uno de sus sueños. “Me quiero congelar óvulos. Tengo claro que quiero ser madre. El año que viene soy mayor para hacerlo, y viendo a una de mis amigas que lo ha hecho, me voy a animar y lo voy a hacer”, señala. Marta Riesco admite que lleva un tiempo pensándolo y que ha llegado el momento de accionar.
“Hace poco me encontré con Lara Álvarez y me aconsejó muchísimo que lo hiciera. Ana Rosa Quintana me cogió por el pasillo y me dijo: ‘Marta, congélate los óvulos’”, continúa confesando en su cuenta de Instagram. “Me veo capacitada para el día de mañana tener hijos, sea sola o con pareja, pero es mejor estar preparada y ahora es el momento que se pueden congelar y ver qué pasa”, añade.
Antes de todo, Marta Riesco tiene pensado informarse de cómo es el proceso. “Hace un mes estuve en el ginecólogo y me dijeron que tenía mi capacidad ovárica a tope”, zanja.
En contra de Antonio David Flores
Durante su relación, Marta Riesco se convirtió en la máxima defensora de Antonio David Flores. Una defensa que le supuso la pérdida de su trabajo en ‘El programa de Ana Rosa’ y ‘Fiesta’, así como problemas de ansiedad que derivaron en una situacion mental delicada por la que tuvo que pedir ayuda psiquiátrica.
En plena recuperación emocional, la periodista no duda en señalar a su expareja: “Es un sinvergüenza”. “He sentido que en estos casi tres años de relación jamás dio la cara por mí. Jamás me defendió. Me dejó sola y perdida solo por guardar su cara públicamente”, expresa.