El antes y el después de Sandra Bullock
La actriz estadounidense de 58 años, conocida por cintas como ‘Ocean’s 8′ o ‘Gravity’ ha experimentado un gran cambio físico con el paso de los años.
Sandra Bullock es una de las actrices más reconocidas de Hollywood. Desde sus inicios, allá por los últimos años de la década de los 80, Bullock siempre ha sido reconocida, además de por sus grandes dotes para la interpretación, por su belleza. Ganadora en 2009 del Oscar y el Globo de Oro a la mejor actriz por ‘Un sueño posible’, la intérprete norteamericana ha experimentado un gran cambio físico a lo largo de su carrera.
En alguna ocasión, Bullock ha manifestado que las alfombras rojas de los festivales de cine le suponen mucha inseguridad. “Me afectan mucho porque no me siento cómoda cuando me visto para ellas”, expresó en el Daily Mail.
Quien sabe si esta inseguridad ha sido clave en que sus seguidores siempre hayan estado pendientes durante toda su trayectoria de su cambio físico. Pero, como les sucede a todas las personas, los años son imperdonables. Y Sandra Bullock no es una excepción para ello.
Niega haberse sometido a ninguna cirugía estética
A pesar de que muchas voces experimentadas aseguran que la actriz ha pasado por el quirófano varias veces para retocarse la cara, Sandra Bullock siempre ha negado haberlo hecho. El episodio más grosero surgió a raíz de la entrega de los Premios Oscars en 2018, cuando la intérprete llegó a la sesión de fotografías con su piel muy tersa y los pómulos algo hinchados.
“Estaba enferma y tenía alergia. Pero tenía que ir porque es parte de mi trabajo. Y luego, al día siguiente, todo el mundo estaba diciendo que me había puesto rellenos faciales e implantes en las mejillas”, explicó en InStyle. El cambio facial fue tal que llegaron a compararla con Michael Jackson.
Operaciones no, pero sí tratamientos
Sin embargo, a pesar de no haber tenido nada que ver con los bisturís, sí ha reconocido en varias ocasiones haber utilizado tratamientos para rejuvenecer su piel. Durante un programa con Ellen DeGeneres, la actriz reconoció haber empleado el Factor de Crecimiento Epidérmico (EGF), un truco de belleza que consiste en una limpieza seguida de un ‘peeling’ intensivo, una máquina de microagujas y una máscara electrizante para relajar la piel.
Tras todo el procedimiento, según la dermatóloga Georgia Louise, una especialista en aplicar el tratamiento en Hollywood, se emplea suero EGF, que se extrae a partir de células procedentes del prepucio circuncidado de recién nacidos coreanos. Este es el motivo por el que Bullock y otras actrices, como Cate Blanchett, han bautizado el procedimiento como ‘facial de pene’.