MBFW | SEMANA DE LA MODA
Marc y Álex Márquez cambian el asfalto por la pasarela
Los hermanos estuvieron apoyando junto a Allianz a los talentos emergentes de la moda española. "Esto hay que verlo una vez en la vida", dice el bicampeón.
Por último y no menos importante, la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid dejó reservada la jornada final de la 75º edición para los diseñadores emergentes, que buscan su hueco en el mundo de la costura. Por segundo año consecutivo, la semana de la moda tenía reservado junto a Allianz un galardón destinado a las jóvenes promesas de la moda española que buscan su hueco dentro de un sector, que a priori nada tiene que ver con los circuitos y que sin embargo, ha encontrado más similitudes de las que a simple vista se pueden llegar a imaginar.
Dos campeones del mundo como Marc y Álex Márquez cambiaron el asfalto por la pasarela, para ser testigos de la labor que desempeña Allianz apoyando a jóvenes promesas que como ellos, en su momento, necesitaron un impulso en su carrera para llegar a lo más alto del motociclismo. Así lo cuenta el mayor de los hermanos a AS: "Como aquí muchos diseñadores y diseñadoras, si no tienes una oportunidad no te puedes mostrar y no puedes intentar dedicarte a lo que más te apasiona en este mundo. En nuestro caso hubo un patrocinador en su día que nos dio una oportunidad, nos apoyó en la base y gracias a ellos conseguimos llegar donde estamos".
Su nueva vida en Madrid nada tiene que ver con su presencia en un evento, en el que "hubiésemos estado igualmente". ¿Por qué? "Porque ha sido conjuntamente con Allianz, nos lo propuso y dijimos que sí ya que creemos que apoyar en la base, dar la oportunidad a jóvenes talentos, ya sea en el motociclismo por ejemplo con el Allianz Junior Motor Camp o ahora aquí con el premio Allianz EGO Confidence in Fashion, es algo fundamental", confiesa Marc.
No es la primera vez que coquetean con el mundo de la costura, pues con anterioridad realizaron campañas para alguna marca de moda, pero sí la primera ocasión en la que disfrutan de la pasarela en una privilegiada primera fila que como bien saben, está reservada para los mejores. "Esto hay que verlo una vez en la vida", dice Álex sobre la experiencia, tras una jornada completa donde cambiaron el mono por el traje, para vivir como uno más lo que se esconde entre bambalinas. "Me recuerda un poco a nuestro mundo, detrás de todo lo que se ve hay mucho trabajo y solo se ve el final", el resultado a toda una vida de dedicación que en su caso, les ha permitido llegar a lo más alto.