El ganador de MasterChef que factura cuatro millones de euros

Operación Triunfo marcó el camino a seguir para decenas de propuestas de un género televisivo, el de los talent show, que a principios del nuevo siglo estaba por explotar en España. Desde entonces, los ha habido de muchos colores aunque la música y la gastronomía se han alzado como las opciones con mayor potencial.

A lo largo de los años han sido muchos quienes han aprovechado la oportunidad mediática para tratar de cumplir un sueño, aunque la realidad es que no todos han sido capaces de lograrlo. Uno de los que sí lo ha conseguido es Aleix Puig (29), ganador de la séptima edición de MasterChef, que tras un primer intento un tanto caótico ha logrado hacerse un nombre en el panorama gastronómico nacional con Vicio, un restaurante con vocación de delivery.

En plena crisis sanitaria, como relata en una entrevista con El País, el cocinero fraguó la idea junto a su socio Oriol de Pablo, aunque al principio el producto eran tapas. “En junio -2020- hicimos un 'friends and family' para unas 50 personas de esta primera marca digital, que eran como unas tapitas que yo hacía en cuarentena en casa. La llamamos Vicio. La primera noche nos dimos cuenta de que tenemos problemas de target: el producto no llegaba bien a las casas… fue la hostia más grande que nos hemos pegado, creo, él y yo en la vida”, relata.

Decidieron parar para no cargarse la marca y en octubre del mismo año volvieron a la carga aprovechando las restricciones en la hostelería en Cataluña. Y ya no eran tapas. La nueva apuesta era una fórmula ganadora: hamburguesas. “Abrimos un jueves que ya no se podía comer fuera, y la marca fue tan bien acogida que el domingo tuvimos que cerrar porque nos quedamos sin pan”, recuerda.

Un año después, Vicio ha facturado más de cuatro millones de euros y ya tienen tres locales abiertos al público en Barcelona, aunque “igualmente el 85% del volumen de ventas sigue siendo el delivery”. “Y es donde nos vamos a focalizar en los próximos 24 meses”, añade el catalán, que también aterrizará en Madrid a comienzos de año. Pero habrá mucho más porque en 2022 prevén una decena de nuevas aperturas y multiplicar por cuatro los ingresos. No está nada mal.