El Iker Casillas más espiritual: del Caribe a Tierra Santa
El exportero mostoleño viajó a Israel para el partido de las leyendas del Real Madrid y se acercó a Jerusalén para disfrutar de algunos de sus monumentos.
Iker Casillas no para. Después de haber disfrutado de unas idílicas vacaciones en la Riviera Maya en uno de los hoteles más exclusivos de México, el exportero del Real Madrid se ha relajado haciendo turismo esta misma semana en Tierra Santa, en Jerusalén. Así lo ha confirmado el mostoleño en su perfil de Instagram, donde ha publicado diferentes fotografías en los lugares de mayor interés cultural de la ciudad, como el Santo Sepulcro, el Muro de las Lamentaciones, el Zoco o la Ciudad Vieja.
Pero esta visita nada tenía que ver con la anterior al mar Caribe. En América, Casillas pretendía desconectar, gozar de unos días de relax en playas de arena blanca y aguas turquesas bajo un sol que hace del enclave un lugar paradisíaco. Ocio en el mar y relajación a todo lujo, mientras que en Jerusalén el turismo era más de monumentos y sobre todo mucho más espiritual, de ahí las imágenes "pensando" que ha subido el exguardameta.
Además, el motivo del viaje también era diferente, y es que Iker ha viajado a Tierra Santa por motivos profesionales. Muy cerca de allí, en Tel Aviv, se disputó la pasada noche un encuentro entre las leyendas del Real Madrid y del Barcelona con futbolistas como Ronaldinho, Figo, Rivaldo, Deco o Rubén de la Red, y él, como directivo de la fundación del conjunto blanco, tuvo que participar en varios actos oficiales previos al encuentro.
El madrileño ha quedado encantado con los múltiples detalles que se pueden observar en las calles de Jerusalén y ha subido hasta cinco fotografías, si bien en la primera de ellas destacaba el "modo pandemia" que provocaba que una de las calles más transitadas estuviera totalmente vacía. "Historia", "lamentaciones", "respeto" y "pensando", fueron las palabras que utilizó para acompañar el resto de imágenes.
Trabajo después de un finde junto a Sara Carbonero
Después de su mediática separación, y cumpliendo con la buena relación de la que siempre han presumido, Iker y Sara coincidieron el pasado fin de semana en la boda de unos amigos en Valladolid. El primero en dar a conocer su ubicación fue Casillas con una fotografía delante del ayuntamiento de la capital castellanoleonesa, y tan solo unas horas después era la periodista la que publicaba unas cuantas imágenes junto a varias invitadas. Pero el detalle más sorprendente fue el sombrero de Sara en una fotografía publicada por el exportero, una imagen que da buena cuenta de su cercanía y de la buena sintonía que mantienen como familia.