Pilar Rubio presume de físico desde su nueva vida en París
La colaboradora de 'El Hormiguero' continúa con su rutina deportiva mientras aprende francés y comienza a conocer todos los rincones de su nueva ciudad.
Pilar Rubio vive su proceso de adaptación a su nueva vida en París. La colaboradora de 'El Hormiguero' ha acompañado a su marido Sergio Ramos en su traslado a la capital francesa para vestir la camiseta del PSG y ya ha visitado algunos de los lugares más icónicos de la ciudad, como el Arco del Triunfo. Sin embargo, la celebridad no olvida el culto al cuerpo del que presume desde hace años y este miércoles ha posado espectacular en su perfil de Instagram precisamente desde uno de sus lugares favoritos: el gimnasio.
"Este es mi momento, mi rato para escucharme y para ganar propiocepción. También es muy importante para mí acompañar cada serie del entrenamiento con una correcta respiración y conectar con mi suelo pélvico. ¡Ánimo! ¡A por el miércoles!", ha escrito la joven para acompañar una fotografía en la que aparece marcando la musculatura de sus piernas, sus brazos y su abdomen.
Así, Pilar vuelve a demostrar que sus hábitos y el estilo de vida saludable que promociona en las redes sociales dan resultados tanto a nivel físico como estético. De hecho, durante meses mostró algunas de las comidas que realiza a lo largo del día poniendo especial énfasis en los alimentos recomendados también para embarazadas, y es que la gestación son algunos de los momentos que mejor ha controlado la televisiva gracias a una buena preparación que además le facilitó posteriormente la recuperación.
La colaboradora de 'El Hormiguero' está aprovechando de la mejor manera el descanso que se ha tomado el programa durante el verano y se está adaptando totalmente a la vida en París, "una ciudad preciosa" en la que tanto ella como Sergio están "muy felices". Ella, por su parte, ya ha comenzado con las clases de francés y no duda en madrugar para recorrer algunas de las calles más exclusivas de la ciudad. Este miércoles mostró, con un café en su mano y "los ojos pegados", la sorpresa que se encontró en su paseo: un desfile militar con motivo del 14 de julio, fiesta nacional en Francia.