Brad Pitt gana el primer asalto a Angelina Jolie: logra la custodia compartida
El juez responsable del caso ha fallado a favor del actor, cinco años después de que este llevara a los tribunales el asunto de sus hijos.
Tras romper su matrimonio en 2016, el proceso de divorcio de Angelina Jolie y Brad Pitt se ha convertido en una lenta y tortuosa batalla en los tribunales con varios frentes abiertos, entre ellos, el de la custodia de los seis hijos que tienen en común. Pero finalmente, tras meses de testimonios y pruebas, el juez encargado del caso ha sentenciado a favor del actor, que exigía la custodia compartida de los pequeños.
El magistrado John Ouderkirk ha desestimado los argumentos del equipo legal de Jolie, que alegaba que la conducta de Pitt con sus hijos había sido abusiva en varias ocasiones (recordamos que la actriz solicitó el divorcio a raíz de un incidente ocurrido entre Pitt y su hijo Maddox durante un vuelo). Sin embargo, el juez ha dictaminado que el testimonio de Jolie "carece de credibilidad en muchas áreas importantes".
Para llegar a esta resolución, se ha contado con las declaraciones de testigos de peso, incluyendo a expertos de los servicios infantiles, encargados de entrevistar a los niños, así como terapeutas y otros profesionales del círculo doméstico de la familia. "Pitt está encantado con la decisión después de tanta acrimonia", ha referido una fuente próxima al caso, "lo único que quería era tener un acceso igualitario a sus hijos, a los que quiere muchísimo".
Jolie, por su parte, va a recurrir la sentencia. Su descontento se basa, sobre todo, en el hecho de que el juez se negara a que los niños testificaran. "El juez Ouderkirk le negó a Jolie un juicio justo; excluyó, indebidamente, evidencias relevantes para la salud, seguridad y bienestar de los niños", ha alegado el equipo de la intérprete en su apelación en el Segundo Distrito de California. Así mismo, se hace referencia a los supuestos antecedentes de violencia doméstica de Pitt, algo que el equipo de Jolie habría tratado de demostrar al entregar al tribunal un documento sellado con presuntas pruebas el pasado marzo.
En caso de conseguir que el juez sea apartado del caso, la sentencia podría ser anulada. La actriz ya trató, sin éxito, de destituir el pasado año al magistrado del proceso de divorcio, que también supervisa este. Ouderkirk, conviene apuntar, presidió la boda de Pitt y Jolie en 2014 en el Château Miraval, la mansión que ambos adquirieron en la campiña francesa. Tras su ruptura, el magistrado fue elegido por la pareja para encargarse de su divorcio.