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'El Rey de Zamunda': por qué debes ver la segunda parte de 'El Príncipe de Zamunda' con Eddie Murphy en Amazon

El actor de 59 años vuelve a la gran pantalla de la mano de uno de sus clásicos, donde volverá a vivir una aventura en Estados Unidos.

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Imagen de Arsenio Hall y Eddie Murphy en 'El Rey de Zamunda'

Después de estar una larga temporada fuera de la gran pantalla -solo ha salido en tres películas en los últimos 10 años-, Eddie Murphy vuelve a estar en boca de todos, y se debe a que vuelve a sacar una nueva película.

El que fuera uno de los favoritos del cine en Hollywood volverá este 5 de marzo a lo más alto gracias a uno de sus clásicos ‘El príncipe de Zamunda’, que después de 33 años, se ha convertido en ‘El rey de Zamunda’.

En esta ocasión, Murphy volverá a reencarnarse en Akeem, quien regresa a Estados Unidos porque se ha enterado de que puede tener un hijo allí, que se llama Lavelle, y está dispuesto a recorrerse las calles de Nueva York con tal de encontrarlo, pues se trata del heredero al trono de Zamunda.

Al principio le cuesta acceder al plan, pero finalmente toma la decisión de marcharse junto a su amigo Semmi -interpretado por Arsenio Hall-, pues hay mucho dinero en juego. Akeem quiere llevar a su hijo a Zamunda para honrar el último deseo de su padre: preparar a su nieto como príncipe heredero. Cabe destacar que Akeem también tiene tres hijas, quienes no pueden ocupar el trono del país debido a sus reglas.

¿Por qué debes verla?

Esta nueva trama podrá verse a partir de este viernes, 5 de marzo, a través de Amazon Prime, servirá como continuación de la película de ‘El príncipe de Zamunda’, y puede ser toda una oportunidad para ver cómo Eddie Murphy se convierte en rey después de tantos años.

El propio actor ha concedido una entrevista a Essence, y ha señalado que “el legado de ‘El príncipe de Zamunda’ es que es única, es rara”. “Las personas negras no tenemos muchas películas como esta. ‘El príncipe de Zamunda’ es una comedia romántica de fantasía. Por lo general, cuando nos vemos a nosotros mismos en la pantalla… son cosas muy pesadas. Rara vez podemos ver algo de escapismo. Simplemente sentarnos a ver una película y no tener que pensar en nada más”, ha añadido.