Neil Young demanda a Donald Trump por utilizar sus canciones sin permiso
La estrella de rock ha presentado una querella contra el equipo de campaña del actual presidente de Estados Unidos ante un tribunal de Nueva York.
Neil Young, uno de los compositores y cantantes más influyentes del rock norteamericano y miembro del Salón de la Fama del Rock and Roll, ha puesto en jaque al mismísimo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, al interponer formalmente una demanda contra él ante la Justicia por el uso que el político está haciendo de sus canciones en su campaña para las próximas elecciones presidenciales de noviembre.
El artista presentó la querella ayer ante un tribunal de Manhattan, y él mismo ha publicado el contenido de este documento en su página web. En él se detalla cómo el equipo del mandatario ha estado utilizando sin permiso algunas de sus canciones durante los mítines de Trump. Concretamente, se menciona la reproducción de sus famosos temas 'Rockin in the Free World' y 'Devil's Sidewalk' en un evento que el líder estadounidense llevó a cabo el pasado 20 de junio en Tulsa, Oklahoma.
El texto deja claro que la motivación de estas medidas por parte de Young son de carácter moral: "La denuncia no pretende faltarle al respeto a los derechos ni a las opiniones de los ciudadanos estadounidenses, que son libres de apoyar al candidato que elijan", se especifica, previamente a señalarse que "el denunciante no puede quedarse con la conciencia tranquila si permite que su música se use como tema principal para una campaña divisiva y anti-estadounidense de ignorancia y odio".
Lo cierto es que Young lleva ya unos años protestando públicamente por el uso indebido que el equipo de Trump ha estado haciendo con respecto a su música. El artista asegura que sus avisos han sido "ignorados" ya que el político nunca ha solicitado las licencias necesarias. La primera vez que utilizó uno de sus temas, de hecho, fue justo después de anunciar su candidatura a la presidencia, en 2015, durante un mitin en la Torre Trump de Manhattan.
En la demanda, el cantante, que en la actualidad tiene 74 años de edad, exige una compensación económica de entre 750 dólares y 150.000 dólares por cada infracción de derechos de autor de la campaña de Trump. Por el momento, ningún portavoz del equipo del mandatario ha respondido de forma oficial a la querella de la estrella de rock.