Grison, de 'La Resistencia', cuenta una curiosa anécdota con la polícía: "Me puse nervioso"
El colaborador del famoso late night conducido por David Broncano habló sobre lo ocurrido en una entrevista con Quequé y Valeria Ros en la cadena SER.
Grison es uno de los rostros más reconocidos y querido del late night presentado por David Broncano. Sus chistes y divertidas anécdotas hacen las delicias del público al que se ha sabido meter en el bolsillo. Ahora, el colaborador del programa del momento ha vuelto a hacer de las suyas y ha contado una divertida anécdota que le ha ocurrido en pleno confinamiento por coronavirus.
Dicha anécdota la ha contado en una intervención para La Lengua Moderna, programa presentado Quequé en la Cadena SER. Durante la emisión del espacio, el humorista ha querido preguntar al músico sobre cuantas veces le ha parado la policía durante el confinamiento por coronavirus mientras iba de camino a trabajar al teatro Arlequín, lugar donde se graba cada día el programa de Movistar +.
Tras esto, el colaborador ha sorprendido a todos cuando ha contado que le suelen parar todos los días: "Diariamente. Lo mismo hay dos o tres días que no me han parado pero de estas cinco semanas que llevamos haciendo el programa todos los días. Tengo el récord de hace un par de jueves tres veces. Hay algunos que sí me conocen y otros que no. Pero sí, me paran", empezó relatando Grison.
Su anécdota con la policía
Tras contar esto, el guitarrista ha proseguido su relato y ha comentado una divertida anécdota sobre lo que le ocurrió un día que le paró la policía: "Me paran de buenas maneras, de malas maneras, de todas las posibles. El otro día me pararon cuando fui a hacer torrijas. Me pararon con una vitrocerámica, con una sartén, con el pan de las torrijas y yo diciendo 'es que voy a hacer un programa de televisión", contó provocando las risas de Quequé ante la inverosímil situación.
Grison contó que posee un papel escrito que le da permiso para salir a trabajar todos los días de su casa a trabajar: "Me pongo nervioso. Me ponía menos nervioso antes porque sabías que estabas haciendo algo mal. Yo estoy tranquilo , pero a veces me tiembla la voz: 'pero dónde va usted, a un teatro, pero si están cerrados' y me quedo ahí diciendo no sé..., explicó entre risas.