Gloria Camila se rompe al recordar cómo se enteró de la muerte de Rocío Jurado

Gloria Camila Ortega vuelve a ser un rostro habitual en la parrilla de Telecinco después de visitar regularmente el plató de 'Supervivientes' para defender a Ana María Aldón, la actual pareja de José Ortega Cano. Pero tras dos años como parte del equipo de 'Volverte a ver', este viernes le ha tocado el turno y se ha sentado en el sofá del programa como la gran protagonista, recibiendo una bonita sorpresa y recordando los difíciles momentos de su infancia, especialmente cuando se enteró de la muerte de su madre, de Rocío Jurado.

Con emoción en el rostro, la joven ha visto un vídeo con imágenes de su niñez acompañada de la cantante y del torero, unos padres que no cambiaría por nada del mundo y que le brindaron una fama de la que no se percató hasta que se hizo mayor: "Van pasando los años, cuando cumples 18 y tu cara se puede destapar... Es como un curso de adaptación, para mí fue duro, fotos por todos lados", confesó. Pero si va más allá en el tiempo, se le hace difícil acordarse de sus primeros años y de cómo aterrizó en la que hoy es su familia.

"Era muy pequeña, tenía tres años y mi hermano seis, tengo pocos recuerdos de cuando llegué. Por lo que me cuentan, cuando llegué era como que estaba en un mundo nuevo. Una familia que te quería, salir del pozo negro, ser feliz de verdad. No supuso ningún problema que me dijeran que era adoptada, me siento querida todo el rato, doy gracias por los padres que me han tocado", reconoció. Cabe recordar que sus padres viajaron a Colombia a por ellos antes de posar en Madrid por primera vez.

Su madre: un pilar de cuya enfermedad no fue consciente

Sin duda, la parte más emotiva de la entrevista ha tenido lugar mientras recordaba los últimos momentos de su madre y lo que ella significaba en su familia: "Yo era muy de padre y mi hermano más de madre. Mi madre se iba de viaje y traía regalos para todos, era su cumpleaños y hacía un fiestón. Era el pilar de la casa, era su humildad y su persona. No se creía superior", afirma.

Las lágrimas brotaban irrefrenables de sus ojos antes de detallar cómo vivió la grave enfermedad de su madre que terminó con su vida el 1 de junio de 2006. "No era consciente de lo que estaba pasando y que podía llegar el final. Mi familia tampoco quería que fuésemos conscientes, éramos pequeños", asegura, y es que Rocío Jurado estuvo más de un año enfrentándose a un cáncer de páncreas, se sometió a un tratamiento en Houston pero la gravedad hizo que todo su esfuerzo no tuviera el desenlace deseado.

"Me entero porque su última noche me mandan a casa de mi tía Mª Carmen. Estábamos con mis primos y al día siguiente tenía colegio. Yo me levanté y pensé que era muy raro que no nos despertaran. Vino mi tía con mi prima y me dijeron que había una nueva estrella en el cielo... Mi madre se había ido al cielo. Fue muy duro", recordó Gloria Camila. Por suerte, encontró en Ortega Cano su mejor apoyo, aunque ella también tenía que sostener al diestro: "Hizo de madre y de padre (...). Le veía llorando todos los días. Intenté darle todo el cariño que me salía, intentaba que no se hundiese. Dormía con él todas las noches, intentaba darle cariño, que sintiese ese cariño, que no le faltase. Poco a poco éramos cómplices, uña y carne".