SÁBADO DELUXE

Massiel confiesa su deseo de morir en su entrevista más dura: "Yo, encantada"

La cantante insistió en más de una ocasión en que prefiere morir a vivir varios años ciega a causa de la enfermedad ocular degenerativa que sufre.

Massiel confiesa su deseo de morir en su entrevista más dura: "Yo, encantada"

Massiel acudió al plató de 'Sábado Deluxe' para mantener un ameno encuentro con Jorge Javier Vázquez y continuar con su histórica sinceridad en los medios, con los que siempre dice lo que piensa sin temor a lo que puedan decir los demás. Sin embargo, la pasada noche su testimonio dejó a todos atónitos al confesar su deseo de morir, unas ganas derivadas de la enfermedad ocular degenerativa que la está dejando ciega y apoyadas por las trágicas muertes de amigos como José Luis Cuerda y Patxi Andión.

"Se está discutiendo en Holanda una ley con la que se propone que todas las personas mayores de 50 años que estén cansadas de vivir y quieran tomar la decisión de no vivir, se toman una pastilla y se van. Eso es maravilloso, que tú puedas decidir cuándo te vas. Económicamente hablando también es un ahorro para cualquier país. Los que nos queramos morir, déjennos que nos tomemos la pastillita y nos muramos", explicó ante el asombro de presentador y colaboradores.

De hecho, por un momento dudaron de si lo que estaban escuchando era real o tan solo hablaba en tono irónico, pero instantes después insistió en su idea dejando claro que no está dispuesta a la vida siendo ciega. "¿Morirme ahora? Yo, encantada de la vida. Si me quedo ciega, que ya soy tuerta, ¿para qué quiero vivir? Si no puedo leer, no puedo ir al teatro, no puedo ir al cine... ¿Qué quieres, que esté pendiente de mí una persona que me manipule? No quiero depender de nadie. Yo prefiero estar en silla de ruedas antes que estar ciega", aseguró.

La enfermedad que padece no tiene cura e "irá a más", tal y como confesó, aunque ahora entrañará un nuevo peligro al tener que someterse a una operación de cataratas: "Me tengo que operar y a los médicos les da miedo porque es peligroso. Me lo tienen que hacer con anestesia general", explicó. Jorge Javier intentó cambiar su parecer asegurando que se puede vivir perfectamente con ceguera, pero no había manera.

"¿Aprender braille a los 72 años? ¿Depender de alguien? Jamás. No consentiría ser dependiente. No quiero depender de nadie nunca. Yo soy huérfana de padre y madre. Mi hijo se levanta a las 7 de la mañana y vuelve a las 21.30 de trabajar y tiene a su mujer y a sus tres hijos. Yo no puedo ser una carga para él", continuó detallando.