El vestido por el que Kim Kardashian lloró tras la gala de los Met en 2013
La modelo reconocía en los últimos días que de camino a casa, y tras la gala de los Met, lloró al ver cómo las redes se mofaban de su look.
Kim Kardashian ha vuelto a revolucionar las redes sociales aunque esta vez no haya sido por ningún posado ni por ninguna foto de Instagram. Sería por su último vídeo para 'Vogue', en donde la estadounidense hacía un repaso de sus peores vestidos y admitía cuál fue el peor que incluso le hizo llorar.
Ocurrió en la gala de los Met en 2013
Kim Kardashian estaba embarazada de la que sería su hija North, que actualmente tiene 6 años. Acompañada por su marido, Kanye West, llegaba a la alfombra roja de la gala de los Met, en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York luciendo una gran tripa.
Pese a no estar invitada a la gala, la influencer acudiría como la pareja de Kanye West, que sí figuraba entre la lista de asistentes. Por aquel entonces, reconoce en el vídeo que era una mujer mucho más tímida y considera que no era 'bien recibida' en la gala. Es por ello, que sería el diseñador Riccardo Tisci quien decidiese vestir a los dos, puesto que su intención era la de vestir al cantante y tuvo la idea de pensar algo para el embarazo de Kim.
“Elegimos un tejido elástico porque queríamos asegurarnos de las alteraciones resultasen sencillas y cómodas”, reconoce Kardashian admitiendo además que no era la única opción para la gala, puesto que además del muy criticado vestido floral, también habría uno en negro.
Las redes le convirtieron en un meme
Sin duda, tal y como reconoce la propia Kim Kardashian, fue uno de los momentos más difíciles de su vida. Pese a haberse decantado por el vestido negro, se dejó llevar por los consejos del diseñador que le decía para convencerle: ¿Qué le envías a una mujer embarazada? Flores”.
La propia influencer llegó a admitir que “incluso Robbie Williams dijo que me parecía a la señora Doubtfire. Estuve llorando todo el camino a casa porque no me lo podía creer”.
Años después, en donde hace repaso de estos vestidos, hoy Kim Kardashian ve este vestido con un grato recuerdo, pese a lo que le hizo pasar en aquel momento. “Solo recuerdo que las gemelas Olsen me dijeron que les gustaba mi vestido”, reconoce añadiendo que ahora le encanta aquel atuendo.