Negocios

David Beckham consigue el control total de su marca tras pagar 45 millones de euros

El exfutbolista inglés ha tenido que desembolsar semejante cantidad para adquir el 33% que poseía su socio Simon Fuller, creador de las Spice Girls.

29/04/19
 DAVID BECKHAM EN UN ACTO PUBLICITARIO DE RELOJES TUDOR

David Beckham y su esposa Victoria han conseguido la propiedad total de la empresa que lleva su nombre tras comprar la participación del 33% que tenía Simon Fuller, su socio desde hace años y creador de las Spice Girls o el talent show American Idol, tal y como ha informado The Financial Times. El exfutbolista, que ha sido condenado a seis meses sin carné por conducir utilizando el teléfono móvil, ha tenido que desembolsar 50 millones de dólares (44,5 mill. de euros).

Beckham Brand Holding comenzó su actividad en 2012 y administra las sociedades y marcas del exitoso matrimonio británico. Entre sus participaciones se encuentran Seven Global y David Beckham Ventures, pero también controla su porcentaje en el Inter Miami FC, el club de fútbol que echará a andar en la Major League Soccer estadounidense el próximo año.

Por su parte, Simon Fuller se ha caracterizado siempre por la excelente mano que tiene para los negocios, habiendo representado a auténticos gigantes de la música y el deporte. Además de crear a las Spice Girls y la millonaria franquicia American Idol, ha representado junto a su compañía a fenómenos de masas como son los Beckham pero también Elvis Presley o Muhammad Ali en el pasado. De igual manera, colaboró con los hermanos Weinstein en el cine y está detrás del éxito de la saga Crepúsculo.

Ahora, se queda sin una parte rentable de sus negocios después de que el exfutbolista de Real Madrid, Manchester United o Los Ángeles Galaxy se retirara para "poseer y construir negocios". Y hasta el momento no le está yendo nada mal principalmente gracias a las colaboraciones que realiza con marcas como L'Oréal o Adidas, pero también tiene vital importancia su propia firma de cosmética masculina. "Para mí, la clave de cualquier colaboración o patrocinio es la autenticidad. También la estabilidad, porque todas mis colaboraciones son de largo recorrido. No me interesa entrar en proyectos y salir de ellos rápidamente", explicó hace una semana para El País.

David Beckham rechaza el término influencer

El inglés llegó a Instagram de manera tardía pero ya supera los 55 millones de seguidores. Sin embargo, y aunque mucha gente imita su estilo o sus rutinas de belleza, rechaza el término influencer porque "no es una palabra que me guste". "Creo que si yo mismo dijera que soy influyente en algo, probablemente mi padre vendría a darme un tirón de orejas y a decirme que me relajara", comentó. "Pero para ser honesto, que la gente hable de mí en esos términos me hace sentir especial, porque significa que he dejado una huella en otras personas y he cambiado algo. Hace años, cuando jugaba al fútbol, la gente copiaba mi peinado o mis tatuajes".