Nicolas Cage solicita la anulación de su matrimonio a los cuatro días de casarse
Según algunos testigos, el actor estaba totalmente ebrio en Las Vegas cuando solicitó la licencia mientras gritaba que ella "se quiere quedar con todo mi dinero".
Los actos realizados por meros impulsos nunca son buenos y menos si en la ecuación se introducen altas dosis de alcohol. Es lo que le ha ocurrido a Nicolas Cage, que el pasado fin de semana acudió a una oficina del Condado de Clark, en Las Vegas, para pedir una licencia matrimonial y casarse en ese mismo instante con Erika Koike, la mujer con la que lleva menos de un año saliendo. Según desvela el portal estadounidense TMZ con acceso a distintos documentos, el actor habría acudido ya a pedir la anulación del matrimonio apenas cuatro días después de firmarlo.
El ganador de un Premio Oscar por Adiós a Las Vegas (Leaving Las Vegas en el título original), ha estado casado en tres ocasiones con Alice Kim, Lisa Marie Presley y Patricia Arquette, pero decidió hacerlo de nuevo con Koike tras iniciar una historia de amor en abril del pasado año. Según apunta el citado medio, Erika le sugirió que se casaran, Nicolas reaccionó con un impulso y accedió a firmar el enlace. Ahora, justifica la anulación por un "conflicto en personalidades y disposiciones que son tan profundas que hacen que los dos seamos incompatibles en el matrimonio".
Los acontecimientos se han precipitado después de que se filtraran unas imágenes del paso de la pareja por las instalaciones administrativas en las que aparecen gritándose de manera notoria. Varios testigos presenciales aseguran además haber visto a un ebrio Nicolas Cage tildando al exnovio de su pareja de "traficante de drogas" y acusándola de querer quedarse con todo su dinero. "Cariño, yo nunca te he pedido que hicieras esto", respondía ella.
En el vídeo no se ve con detalle si Cage estaba realmente borracho o tan solo mostraba una parte de su humor mientras instaba a la joven a entrar a firmar. Aún así, y viendo la escena que estaban montando, fueron llevados directamente a una de las salas privadas de donde salieron minutos más tarde con unos papeles, tal y como afirma Daily Mail basándose en una fuente presencial.
Así, y aunque la licencia tiene una validez de un año hasta la celebración de la boda, la visita de Cage a la corte para solicitar la anulación hace que todo conduzca a pensar en un enlace impulsivo que se salda de la peor manera unos días después. Cabe señalara además que minutos después de casarse fueron filmados a la salida del Bellagio en una nueva escena de gritos por ambas partes, aunque en esta ocasión con más participación de Erika Koike.