Nadie quiere prestar un vestido a Bebe Rexha para los Grammy por usar una talla 40
La cantante ha denunciado que ningún diseñador quiere vestirla para la gala, por carecer de un cuerpo normativo y de una talla de pasarela.
Bebe Rexha se haya inmersa en un momento muy agridulce. La neoyorquina de origen albanés tiene, por un lado, motivos de sobra para celebrar: tras un año espléndido en el que su reconocimiento ha crecido como la espuma, ha sido nominada por primera vez a los Grammys, que se celebran el próximo 10 de febrero. En concreto, la joven de 29 años compite por el premio a Mejor Nueva Artista y a Mejor Actuación Country de un Dúo o Grupo por su colaboración con Florida Georgia Line en el tema "Meant to Be".
Pero algo está empañando la ilusión por asistir a la ceremonia de la autora de "I'm a Mess". Y es que, como ella misma ha confesado desde su plataforma de Instagram, se está topando con muchos problemas sorprendentes para encontrar un vestido para la gala. Y la razón no es otra que "ser demasiado grande". O al menos esto piensan los directores creativos de las casas de moda con las que ha contactado el equipo de la cantante. Al parecer las firmas carecen de vestidos 38 o 40, tallas que fácilmente se encuentran en cualquier tienda normal de ropa.
La poderosa respuesta de la cantante: "Joderos, no quiero llevar estos malditos vestidos"
Rexha ha hecho su denuncia en forma de vídeo, en el que además de explicar la situación, añadía con visible enfado lo siguiente: "Estáis diciendo a todas las mujeres del mundo que tienen una talla 38 que no son bonitas y que no pueden lucir estos vestidos. A todas las personas que han dicho esto, joderos, no quiero llevar estos malditos vestidos."
La cantante ha acompañado además sus palabras en vídeo de un texto en el que exponía un alegato político muy claro: "Las mujeres deben amar sus cuerpos. Somos preciosas en cualquier tamaño. ¡Pequeño o grande!". Unas líneas que cerraba con el hashtag #LOVEYOURBODY. Además, Rexha confirmaba que por supuesto que iba a atender a la ceremonia con "su trasero de talla 38".
El caso de Leslie Jones
A dos semanas de la gala, la joven va a contrarreloj para encontrar un vestido. No cabe duda, no obstante, que tras su reproche público en las redes y el eco que este está teniendo, algún diseñador como Christian Siriano se ofrecerá a vestirla. Este ya acudió en ayuda de la actriz Leslie Jones cuando una situación similar se produjo durante el año 2016. La intérprete no encontraba a nadie que quisiera confeccionarla un diseño de su talla 44 para llevar en el estreno del remake de "Los cazafantasmas". Hasta que el Siriano se ofreció a hacerlo: “A mí, la talla y la fama de las actrices no me interesa, me interesa la heterogeneidad de mis clientas”, manifestó entonces el que se ha convertido en el modisto preferido de las famosas curvys.