Mohamed Salah construye un hospital y una escuela en su ciudad natal
The Sun acude a Nagrig para conocer de primera mano las labores soliadrias que realiza el jugador del Liverpool, recopila testimonios de sus habitantes y vive el cariño que recibe el jugador en su tierra.
El jugador egipcio del Liverpool, Mohamed Salah de 25 años de edad, no ha olvidado sus raíces y se ha propuesto mejorar la vida de sus paisanos. El extremo derecho del Liverpool vive uno de los momentos más dulces de su carrera. Salah ha sido galardonado como el mejor jugador del mes de febrero de la Premier League, y es uno de los máximos goleadores de la Champions, con 8 goles a su favor frente a los 15 de Cristiano Ronaldo y empatado con el jugador del Sevilla Wissen Ben Yedder.
Pero estos triunfos no han hecho olvidar al jugador de donde proviene. La publicación inglesa The Sun ha viajado hasta la ciudad natal del jugador, Nagrig, que se encuentra a 100 km del Cairo, para conocer las labores solidarias que está realizando para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Para ello, el jugador está construyendo un Hospital y una escuela. En las fotos podemos ver que la construcción se encuentra en una fase muy temprana. La escuela irá destinada a las niñas de la zona, lo que va a suponer un alivio económico para muchas familias que tenían que mandar a estudiar sus hijos en autobús fuera de Nagrig.
Pero sus acciones para con su pueblo no acaban ahí. Salah ha comprado una ambulancia y un equipo médico que ya está trabajando en la zona y ayuda a cientos de personas a diario. Además, el jugador del Liverpool gasta cada mes casi cuatro mil euros en alimentos destinados a las familias más desfavorecidas de su ciudad.
El reportaje da voz a personalidades de la zona que no dejan de agradecer el trabajo que lleva a cabo el jugador en su tierra. Por ejemplo, El doctor Al-Ghamrawi médico de a zona, ha asegurado que Salah “ ha financiado la compra de dos incubadoras para bebés prematuros en el Hospital de Basyoun, lo que ha ahorrado a las familias la carga de tener que viajar fuera de la provincia para recibir tratamiento”.
Todas estas acciones desinteresadas han conseguido que el jugador sea un héroe local. Salah se ha convertido en un hombre muy querido en su tierra y sus habitantes se lo agradecen mediante murales con su cara en las paredes de las calles de la ciudad y poniendo su nombre a escuelas y centros deportivos.