Martínez se exprime ante Nakashima; Carballés, KO
Martínez supera, en tres horas y 18 minutos, al tenista americano por 7-5, 5-7 y 6-4. Carballés, tocado, cae ante Fearnley por 1-6 y 5-7.
La tierra batida del Real Club de Tenis Barcelona empieza a calentarse. Pese a las amenazantes nubes de lluvia procedentes de Collserola, el cielo aguantó y los rayos de sol acompañaron el triunfo de Pedro Martínez por 7-5, 5-7 y 6-4. El tenista español de 27 años, nacido en Alzira (número 49 del mundo) superó al americano, de 23 años, Brandon Nakashima (32). El duelo, tan larguísimo (tres horas y 18 minutos) como extenuante, dio la sensación que transcurrió igualado hasta que Martínez quiso. Hasta que aceleró en lo finales del primer y tercer set y encontró confianza en su derecha y en sus dejadas, el talón de Aquiles de Nakashima. Martínez sigue adelante en este Godó y en segunda ronda espera al ganador del Pablo Carreño-Arthur Fils (mañana, martes).
Empezó el partido perfecto para el español, con un break y afianzando su saque. Rápido, sin fisuras y leyendo bien a un frío Nakashima. El americano logró levantar la cabeza en el tercer juego, encadenando buenos golpes de derecha e inaugurando su marcador (2-1). Tras ello, un intercambio de golpes, aunque con ambos tenistas lejos de lograr el break y se llegó al 3-2. En el siguiente juego, una doble falta y un error no forzado de Pedro Martínez, tirando una derecha fuera, dio alas a Nakashima y se puso el 3-3 en el marcador. El americano, firme con su saque, confirmó su servicio y se puso 3-4, pero entonces emergió la gran lectura de partido de Martínez.
El español encontró el punto débil en su rival con las dejadas, excesivamente lento de piernas, y se fue todo al 5-5. Ahí, Martínez fue quien no dejó de acelerar y, con un gran revés corto, firmó su segundo break y se colocó 6-5. El español se mostró firme con su saque, fue siempre por delante, y cerró el primer set por 7-5 en justo una hora.
Ya en el segundo set, a Nakashima se le vio un poco más suelto y a Pedro Martínez sufrir para mantener su saque. Pero no lo tuvo que lamentar el español y, con calma tensa, se llegó al 4-4. Ahí, como en el primer set, Martínez fue quien mostró más ilusión por dar un paso al frente y volvió a leer las debilidades de su rival y le achuchó. El noveno juego fue trepidante y Martínez no solo lo arrancó bien, colocándose 0-30, también disfrutó de bola de break. Pero Nakashima no se amedrentó, se levantó y a su tercera bola de set se llevó el 4-5. Salió tocado Martínez, se vio en el 0-30 a favor del americano, pero el español respondió bien y puso el 5-5. La historia del primer set podía repetirse, aunque Nakashima no tropezó en la misma piedra. Todo lo contrario, pagó con la misma moneda a Martínez. Su juego al resto fue impoluto y, en blanco, se lo adjudicó. 5-7 para él en ua hora y 11 minutos.
Todo se iba a decidir, claro, en el tercer set. Y Martínez recuperó aire, y su buen juego. No tardó en romper el servicio a Nakashima y se puso 2-1. El español afianzó el break con su saque y puso velocidad de crucero con el 3-1. Ambos tenistas fueron aguantando sus servicios, con un poco más de sufrimiento el español, pero le servía igual. Era lo que le iba a asegurar el triunfo. Para el 5-3 levantó un 0-30 y llegó a desesperar a un Nakashima incómodo. Al final, con 5-4 sirvió para ganar el encuentro y, pese a apurar al deuce verse presionado por Nakashima (tuvo bola de break), no falló.
Pesadilla para Carballés
Roberto Carballés fue llegar e irse del Godó. El tenista tinerfeño, que acabó el partido con una lesión en su pierna izquierda, se vio sorprendido por Jacob Fearnley (1-6 y 5-7). El británico de 23 años (número 74 del mundo) sustituyó al lesionado Jordan Thompson (adductor derecho) y demostró que las segundas oportunidades funcionan. Fue rescatado por la organización del torneo porque ayer, domingo, cayó ante el colombiano Daniel Elahi Galan y dejó en la cuneta a Carballés. Será el británico quien estará en segunda ronda para medirse al ganador del duelo (mañana) entre Álex de Miñaur y Tomás Etcheverry.
El partido de Carballés duró una hora y 53 minutos y fue una pesadilla. En el primer juego ya sufrió un break y no acabó de sentirse cómodo en ningún momento. Únicamente ganó un juego en un primer set dominadísimo por Fearnley. El 1-6 en 40 minutos escoció al español. En el segundo set, Carballés intentó reaccionar, pero una lesión le trastocó todos los planes. Tuvo que ser atendido por los servicios médicos, cuando tenía el marcador a favor en el segundo set, y ahí se acabaron todas sus opciones de remontada. Fue un quiero y no puedo. Aguantó hasta el final, pero Fearnley no le perdonó.
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