Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

TENIS | LAVER CUP

El último partido de Federer: un dobles... ¿con Nadal?

Roger Federer confirmó que jugará su último partido como profesional en el dobles de la jornada del viernes. No reveló si será con Nadal.

Londres
El tenista suizo Roger Federer atiende a los medios de comunicación en la rueda de prensa previa a la Laver Cup.
Clive BrunskillGetty

Con americana azul oscura, camisa blanca y una sonrisa cuando Nicola Arzani, vicepresidente y relaciones públicas de la ATP, dijo que no era necesaria ninguna introducción para darle paso, Roger Federer compareció este miércoles ante los medios de comunicación en la rueda de prensa previa a la Laver Cup (23 al 25 de septiembre), su última competición como tenista profesional tras más de 22 temporadas en el circuito.

Federer, de 41 años, confirmó en el O2 Arena de Londres que el último partido de su carrera será el dobles del viernes por la noche, aunque afirmó que aún no sabe quién será su pareja para ese partido, pese a que todo apunta que se tratará de Rafa Nadal, que llegará este jueves a la capital inglesa. “Estoy nervioso, no he jugado desde hace mucho. Espero ser competitivo. Me estoy preparando para ese partido y veremos con quién juego”.

El tenista de Basilea admitió que no se ve en condiciones de disputar encuentros individuales y que, por esa razón, le pidió a Bjorn Borg (capitán del equipo de Europa) que le alineara en ese dobles en la primera jornada, ya que no podría afrontar los del sábado y el domingo sin participar al menos en un individual, según establecen las reglas de la Laver. “Es un torneo que no me quería perder, pero conozco mis limitaciones. Y por eso hablé con Bjorn. Hablaron con el torneo, con John (McEnroe, capitán del Resto del Mundo) y con la ATP, y todo el mundo dijo que le parecía bien. Desde el sábado, me sustituirá Matteo (Berrettini)”.

El suizo avanzó la posibilidad de que su pareja en este último partido sea uno de sus mayores rivales y, a la vez, grandes amigos del circuito: Nadal. “Me encantaría jugar el dobles con Rafa, sería una situación única. Durante mucho tiempo hemos luchado juntos para tener siempre este respeto mutuo y las familias y nuestros equipos, siempre nos llevamos muy bien. Tener la carrera que hemos tenido y, pese a estar a lados contrarios de la pista, tener una gran relación, es un mensaje fantástico, no solo para el tenis, sino para todos los deportes y tal vez incluso más allá. Por eso creo que sería genial. No sé si sucederá, pero podría ser un momento especial”.

Federer también reveló cómo tomó la decisión de retirarse. “A principios de verano, durante los entrenamientos, noté que la rodilla no iba bien. Supe que no sería fácil y que era parte del proceso, pero llegó un momento en el que vi que no podía, que era el final. Tomé la decisión unos días después de Wimbledon, y me dije: ‘¿En qué punto estoy?’ Había estado en esa situación delicada mucho tiempo, así que sé que es una decisión correcta, una buena decisión”. Roger describió las dos caras de su decisión de abandonar el tenis a nivel profesional: “Me encanta estar en la pista, jugar contra los muchachos, viajar. Realmente nunca sentí que fuera difícil para mí ganar, aprender de perder, todo fue perfecto. Amo mi carrera desde todos los ángulos. Esa es la parte amarga. La parte dulce es que sé que todo el mundo tiene que hacerlo en un momento dado. Todo el mundo tiene que dejar el tenis. Ha sido un gran, gran viaje. Por eso, estoy muy agradecido”.

“Es una pena no poder jugar contra Alcaraz”

Federer, que se entrenó después con Stefanos Tsitsipas antes de fotografiarse con el inspirador del torneo, Rod Laver, habló sobre Carlos Alcaraz, que señaló al helvético como su referente cuando le preguntaron sobre ese particular a los 12 años durante el torneo infantil de Roland Garros. “Es una pena no haber podido jugar nunca contra él. Por supuesto, observé de cerca lo que hizo en el US Open y durante todo el año. Ha sido fantástico. Siempre dije que habrá nuevas superestrellas en el tenis, y él es una de ellas. El tenis es brillante. Sé que a veces la gente no tiende a ver eso ni a pensar así”, explicó. “Fue lo mismo cuando Pete (Sampras) y Andre (Agassi) se fueron. Ellos pensaron, bueno, ¿qué tenemos aquí ahora? Chicos que ganan Slams, nunca hay el mismo ganador. Bueno, obtuvieron los mismos durante muchos años. Estábamos Novak (Djokovic), Rafa (Nadal), yo mismo, Murray y Stan (Wawrinka). Fue agradable verlo, porque eso es lo que siempre pensé”, continuó, antes de contar “una anécdota graciosa con Carlos”. Me entrené con él en Wimbledon un año cuando él jugaba en júniors. Pensé que lo hizo bien. Ya sabes, fue una buena práctica o calentamiento, creo que lo fue. Y Juan Carlos (Ferrero) estaba allí y yo más emocionado de verlo, obviamente, porque es uno de los míos, de mi época (el valenciano tiene 42 años). Luego, al día siguiente, o dos días después, en mi día libre, pensé: ‘quiero pelotear con Juan Carlos, no con Carlos’, solo porque me gustaría entrenarme con él y estoy muy relajado en esas sesiones, de todos modos. Acabé jugando con Ferrero. Fue grandioso. No perdió una pelota. Todavía podría estar en el circuito. Estoy muy feliz por él también en particular, porque están teniendo tanto éxito”.

El Genio de Basilea eligió, un poco a bote pronto, algunos de los mejores momentos de su trayectoria: “Pienso en el primer Wimbledon, el partido contra Sampras allí, la remontada de 2017, ganar Australia, Roland Garros 2009. Tan dulce como tal vez un cuarto de final en un 500 del que aprendí algo. Quién sabe qué fue. Tengo que volver al banco de memoria y pensar, está bien, ¿dónde hubo momentos que significaron mucho para mí? A veces, muy a menudo, hubo conversaciones fuera de la pista con el equipo o conocer a alguien. No puedo dar un ejemplo específico. Pero tengo la suerte de que casi siempre escojo y elijo qué momentos fueron los mejores porque hubo muchos. Una vez más, tuve mucha suerte de pasar por tantos”. Roger cree que convertirse en un jugador “consistente” ha sido uno de sus mayores logros: “He podido permanecer arriba y aspirar a ganar cada torneo durante 15 años. Creo que mirar hacia atrás tiene un significado especial para mí porque siempre miré a Michael Schumacher, Tiger Woods, todos los demás que se quedaron tanto tiempo en la cima y no entendía cómo lo hacían. Y luego formé parte de ese grupo y fue una gran sensación”.

Federer contó lo entrañable que son para él algunas rutinas de su carrera como tenista, pero cómo al mismo tiempo nos las echará de menos: “Adoro atarme las zapatillas, prepararme, poniéndome el pañuelo, mirarme en el espejo y decir, ¿estamos listos? Pero por mucho que me guste, estoy feliz de no tener que pasar por eso otra vez. Tener esos nudos en la barriga, esperar todo el día, desayunar, pensar, está bien, esta noche tengo otro gran partido. Tengo que esperar otras 15 horas. Es divertido pero estresante, y son días lentos. Un tenista espera mucho. Claro que voy a extrañar muchas cosas, los pequeños momentos, ya sabes, después de los partidos, cuando todo está dicho y hecho, y el peso baja y puedes ir a cenar con tus amigos y tu equipo, y hablar de otras cosas, además de tenis”. Pero a quienes más echará de menos es “a los aficionados”. “Están en el centro de todo, porque yo también viví los tiempos de COVID, como todos, y no fue divertido. Sin ellos, probablemente me habrían quitado más del 80% de mis emociones, de mis sentimientos, de lo que habría significado. Extrañaré eso, ya sabes, cada interacción en la cancha, fuera de la cancha, encontrándome con gente, no sé dónde. Eso probablemente todavía sucederá a veces, pero ya no tanto, firmando autógrafos. Sé que estas personas vinieron de un lugar lejano, gastaron mucho dinero, se tomaron un tiempo libre de sus vacaciones o del trabajo y vinieron a verme jugar”.

Sobre el momento del anuncio de su adiós al tenis, Federer siente que se haya demorado “por los que tuvieron que pasar por esto”. “Así que creo que todos estamos aliviados en este punto. Lo que voy a hacer a continuación es leer mucho de lo que tal vez muchos de ustedes hayan escrito y muchas cosas de la televisión. Así que eso es lo que quiero hacer a continuación es ponerme al día un poco, ver a todos, y luego irme de vacaciones un rato con la familia”. La elección de Londres como sede de sus despedida se debe, además de a su apego por la ciudad que le vio triunfar tantas veces en Wimbledon, “a tener a Bjorn Borg en el banquillo” con él. “Y a todos los demás (Djokovic, Nadal, Murray...) alrededor, eso me hizo sentir que no iba a estar solo anunciando mi retiro”. Por último, el suizo habló de lo que le hace sentirse más satisfecho. “Mi longevidad es algo de lo que estoy muy orgulloso. No necesito todos los récords para ser feliz, les digo eso”, sentenció antes de ser ovacionado por los periodistas.