Se busca favorito para ganar las Finales de la Davis
Australia y Países Bajos abren este martes una edición con pocas certezas. El debut de España ante Croacia será este miércoles.
No hagan predicciones ni se jueguen el dinero. Seguramente lo pierdan, porque las Finales de la Copa Davis que arrancan este martes (16:00, Movistar) en Málaga, con un Australia-Países Bajos, son como la vida misma, un misterio. Comparecen en el Martín Carpena de Málaga seis de las ocho primeras naciones del ranking de la competición (Croacia, España, Estados Unidos, Alemania, Canadá e Italia, en orden descendente) más Australia (11ª) y Países Bajos (14ª). Con las últimas bajas, la más reciente la del italiano Berrettini, que debía ser primer espada transalpino en ausencia de Sinner, la cuenta ha quedado en dos tenistas Top-10 presentes.
Esto tiene una lectura mala, la obvia, que es la pérdida de pedigrí. Pero también una buena: con menos estrellas, los roles se difuminan, y equipos que a priori podían partir con la vitola de favoritos parecen más mundanos, gregarios en el mismo pelotón que el resto. Hay incertidumbre y es buena noticia. Nadie quiere ver una película de la que ya se sabe el final.
Uno de los conjuntos más mermados es el español, que se presenta sin los números uno y dos del mundo, Carlos Alcaraz (lesionado) y Rafa Nadal (por decisión propia). Y para colmo le ha tocado el primer baile con la más fea (miércoles, 16:00), una Croacia que lidera el ranking y que tiene un dobles de lujo (Mektic y Pavic, 5º y 8º de la ATP) por si falla alguno de sus nada desdeñables individuales (Cilic, Coric y Gojo). Antes, este martes (16:00), se citan Australia, sin Kyrgios (se borró) pero con De Miñaur, y Países Bajos, una sorpresa de la fase de grupos en crecimiento que tiene a Koolhof, número uno en dobles.
El suflé italiano ha perdido cuerpo con los citados contratiempos, pero Filippo Volandri, capitán de los azzurri, también pone paños calientes. “Tengo múltiples opciones para elegir”, afirma el extenista, que para individuales cuenta aún con dos de los 50 mejores del mundo, Musetti y Sonego, y para el dobles tiene una pareja solvente en el díscolo Fognini y el más ordenado Bolelli.
El jueves (10:00) Italia debutará contra los Estados Unidos de Taylor Fritz, flamante semifinalista del Masters y un jugador ya consolidado en la élite. Le acompañan Tiafoe, una de las 20 primeras raquetas de la lista, Tommy Paul y el comodín Jack Sock, ya más centrado en el dobles.
Ese mismo día (16:00) será el turno de otro cruce con ausencia. En este caso, la de un Zverev que no ha vuelto a pisar pista desde que una lesión en un tobillo le retiró de su partido de semifinales de Roland Garros ante Nadal. Sin el arma principal, que desde 2019 solo ha jugado la eliminatoria de clasificación de este año, Alemania queda reducida a Otte, Hanfmann y Struff, con el 65º puesto del primero como tope, y a unos doblistas competentes en Krawietz y Puetz. “Por ranking no seremos los mejores, pero podemos con cualquiera”, saca pecho Michael Kohlmann, su líder. Enfrente Canadá, que tiene uno de los dos Top-10 de la cita en Auger-Aliassime, ahora de nuevo acompañado por Shapovalov, ausente en Valencia. Un equipo joven y dinámico que apunta alto en esta Davis sin favoritos.