Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ROLAND GARROS

"Una operación supondría el fin de la carrera de Rafa Nadal"

Tres doctores (dos traumatólogos especialistas en pie y otro en dolor) analizan el tratamiento al que se someterá el tenista balear para mejorar sus dolores y la posibilidad de una intervención.

Madrid
"Una operación supondría el fin de la carrera de Rafa Nadal"
BENOIT TESSIERREUTERS

Rafa Nadal tratará de buscar esta semana una solución al intenso dolor que padece en el pie izquierdo, provocado por el síndrome de Müller-Weiss (ver gráfico) y que le ha obligado a disputar Roland Garros con la zona anestesiada. "En las circunstancias en las que estoy jugando no quiero y no puedo seguir", dijo. Y reveló la técnica a la que se va a someter: inyecciones con pulsión retráctil, una técnica aplicada por anestesistas.

"La técnica no es nueva, lo innovador es utilizarlo para eso", apunta Ian MacVeigh, jefe de la Unidad del Dolor de la Clínica CEMTRO, que explica la mecánica: "Se hace con una aguja que tiene una punta activa con un electrodo que se inserta en la zona dañada y emite ondas de radio, pulsos de 20 milisegundos con pausas de otros 480. No destruye tejidos, sino que produce una neuromodulación en el nervio. Con el campo eléctrico y magnético se alteran las fibras del dolor y con ello su transmisión", explica el doctor.

"Con el nuevo tratamiento, se buscará evitar la intervención quirúrgica para seguir compitiendo. Puede ser más eficaz en el tiempo que una infiltración, pero no solucionará el problema", acota Ramón Navarro, jefe de la Unidad de Tobillo y Pie de la misma clínica madrileña. La penúltima tabla a la que podría agarrarse Nadal, ya con 36 años.

Ampliar

"La radiofrecuncia pulsátil no quita sensibilidad a la articulación porque no destruye fibras nerviosas. En principio, la movilidad no se vería afectada", tranquiliza MacVeigh, que considera Wimbledon (desde el 27 de junio), "demasiado próximo para ver un resultado espectacular".

¿Y si no funciona? "Lo indicado sería una osteotomía de calcáneo para eliminar el varo del pie. Con eso mejoraría enormemente, pero no se conseguiría arreglar el escafoides porque se supone que estará fracturado. Por lo tanto, convendría realizar una artrodesis, una fijación de la articulación para que no se mueva y deje de doler. Pero eso puede suponer el final de su vida profesional", revela Joaquín Óscar Izquierdo, director de la Cátedra Internacional de Cirugía Podológica de la UCAM (Universidad Católica San Antonio de Murcia).

"Las dos intervenciones, en el caso de un deportista de élite, pueden significar el fin de su carrera; sería una solución para llevar una vida normal", coincide Navarro, que pese a haber tratado a muchos deportistas, no conoce ningún caso del síndrome de Müller-Weiss en el deporte de alto nivel. "Aunque el caso de Nadal resulta imprevisible... Ha sido un milagro que haya llegado en una condición física buena infiltrándose sólo para competir. Y que dijera que cambiaba el título en París por un pie nuevo, indica el dolor que está pasando", reflexiona el doctor de la Clínica CEMTRO. Las soluciones para Nadal son cada vez más escasas. Pero, como él repite, se seguirá dando oportunidades para competir.