Muguruza: "En Madrid se espera mucho de mí, pero no cuajo"
Tras su derrota ante la ucraniana Kalinina en segunda ronda del Mutua Madrid Open, Garbiñe Muguruza admite que este es un torneo que le "cuesta".
Madrid sigue siendo una plaza que le "cuesta" a Garbiñe Muguruza, tal y como ella reconoció en rueda de prensa después de su dura derrota frente a la ucraniana Kalinina. En ocho participaciones, el mejor registro de Garbiñe en el Mutua Madrid Open son los octavos de final. En 2022 no mejorará ese dato, y es que su eliminación en segunda ronda supone un duro golpe para la ganadora de dos Grand Slam.
Oportunidades perdidas: "Físicamente, he tenido molestias en mi pantorrilla derecha, y por precaución me han colocado un vendaje. Ha sido un partido extraño. Estoy sorprendida con su juego, ha jugado muy bien. No la conocía. No han cuajado esas bolas de break que he tenido, el partido se ha ido en puntos".
Pocos partidos en tierra: "Creo que ha influido, físicamente me he notado un poco mermada, aunque haya tenido un día de descanso. Por los entrenos, por el partido anterior, también por la tensión que te hace estar un poco agarrotada. Hoy sí he notado un poco que me ha faltado chispa en algunos momentos y que ella sí viene de jugar otros partidos".
Hándicap para preparar Roland Garros: "No creo, ahora voy a hablar con mi equipo, estaba viendo con ellos cómo estaba mi gemelo. Me haré unas pruebas por si acaso para no ir allí con dolor o que me pase algo grave. Desgraciadamente, tengo unos días hasta Roma para ver cómo reacciona el gemelo".
Expectación generada: "Está claro que intento poner una cara decente, es un triste partido que se me ha escapado de una manera... No sé exactamente qué es lo que me ha faltado, algún punto, algo de chispa, jugar más partidos... Mucha gente espera muchas cosas de mí, sobre todo en este torneo, que es el evento en el que no acabo de cuajar. La expectativa está ahí, a veces las cumplo y otras veces no. Sí que es cierto que este torneo me cuesta. Cada vez que vengo espero a ver si este es el año en el que por fin puedo tranquilizarme, controlar mis nervios y emociones. Cuando estaba en pista estaba muy tensa, no lograba jugar mi tenis como en otros torneos. Creo que es una mezcla de tanta expectativa hacerla realidad, no decepcionar al público. Eso me está jugando una mala pasada. Este año he intentado estar más animada con el público, pero la realidad es que genera tensión y todavía no logro sacar mi tenis en este torneo".
No se dan las cosas en 2022: "Hay un poco de todo. Los resultados van y vienen, el año pasado tuve mi mejor temporada a nivel de resultados, de estabilidad en casi todos los torneos, conseguir muchos trofeos. Este año está siendo diferente, ha empezado un poco atropellado, pero no por eso pienso que sea un mal año. De momento, tengo muchos más torneos por delante para intentar coger las sensaciones del año pasado. Cada temporada es un mundo nuevo".