Novak Djokovic volvió a celebrar una victoria casi dos meses después tras ganar a Laslo Djere en su debut en el torneo de Belgrado. Un triunfo que, sin embargo, también mostró las carencias de Djokovic en su juego en un 2022 bastante irregular al no poder jugar numerosos torneos por su negativa a vacunarse contra el coronavirus.

En la rueda de prensa posterior al partido Djokovic confesó que supo afrontar el encuentro mejor que en Montecarlo y que se le hace raro jugar ante tenistas serbios, con los que mantiene una gran relación. "Ha sido un partido dramático, de más de tres horas, pero gané. Djere jugó muy bien y fue mejor durante gran parte del partido. Al contrario que en Montecarlo, me sobrepuse y gané. Pero tendré que jugar mucho mejor contra Kecmanovic porque está en muy buena forma. Se me hace muy extraño jugar contra tenistas serbios porque los veo como amigos, entrenamos juntos... Me alegro mucho cuando tienen éxito. Djere, por ejemplo, tiene mejor hábito de trabajo que nosotros, y aunque se trate de un amigo, cuando juego lo hago para ganar".

A Djokovic también le preguntaron sobre la gran noticia del día en el tenis: la decisión de Wimbledon de no dejar jugar a los tenistas de Rusia y Bielorrusia este año por la Guerra de Ucrania, entre ellos al número 2 del mundo, Daniil Medvedve. Una decisión de Djokovic no comparte. "Nunca apoyaré las guerras porque yo soy un hijo de la guerra. Sé el trauma emocional que deja y sabemos lo que pasó en los Balcanes y en 1999. La gente está sufriendo pero no puedo apoyar la decisión de Wimbledon porque los tenistas rusos y bielorrusos no tienen nada que ver. La decisión de Wimbledon es una locura".