Un incierto Djokovic llega a París con el título de Belgrado
Derrotó al eslovaco Alex Molcan, 255º del mundo, en dos sets pero perdió cuatro veces su saque. "Puedo ganar a Nadal en París", avisa.
Novak Djokovic llegará a Roland Garros, donde pretende asaltar la fortaleza de un Rafael Nadal que ya tiene hasta una estatua en el Bosque de Bolonia, con el título de Belgrado bajo el brazo. Visto desde fuera, con más dudas que certezas. Visto por él ("me voy con grandes sensaciones y un subidón de confianza"), lanzado.
Lo de las dudas se justifica porque en la final del ATP 250 jugada en el Novak Tennis Centre, ante su gente, perdió cuatro veces su servicio (tres en el primer set) ante el eslovaco Alex Molcan, el número 255º del mundo, al que acabó derrotando por 6-4 y 6-3 en 1h:28. Una puesta en escena no demasiado brillante (ante un jugador que inauguró en Belgrado su casillero de victorias ATP), en un torneo en el que en semifinales, nervioso, perdió un set frente al desconocido Andrej Martin. Lo pagó su raqueta, que acabó destrozada.
Djokovic, con un único triunfo en París en 2016, logra así un tercer título en su país (tras los de 2009 y 2011), el 83º de su carrera y el segundo del año, pues se adjudicó el Open de Australia. Pero también se presentará en Roland Garros con una irregular campaña de tierra. Cayó en octavos en Montecarlo (Dan Evans), en semifinales en el primer torneo jugado en Belgrado (Aslan Karatsev) y contra Rafa Nadal en la final de Roma en tres sets.
"En Montecarlo estaba detrás de los mejores, pero ahora me veo con opciones de ganar a cualquiera, incluso a Rafa en París. La final de Roma me ha hecho ver que puedo derrotarle", avisó en rueda de prensa.
El serbio debutará en París contra el estadounidense Tennys Sandgren y podría verse con Roger Federer en cuartos de final y con Nadal en semifinales. Un cuadro difícil al que él dice llegar con la mochila repleta. Aunque parezca a medias.