"Pierdo, gano 12.000 euros y me voy para casa: es perfecto"
Benoit Paire volvió a protagonizar unas sonadas declaraciones tras su derrota en primera ronda en Montecarlo. "Te dan ganas de tirarte por la borda".
Benoit Paire no levanta cabeza en el circuito ATP en esta temporada 2021. El tenista francés cayó este domingo ante el australiano Jordan Thompson en un encuentro en el que, al contrario que otras ocasiones, sí plantó cara pero en el que finalmente perdió por 6-4, 6-7 (3) y 7-6 (5) después de tres horas de partido.
En la rueda de prensa posterior al partido el francés volvió a hacer gala de su polémica y, al igual que ya hiciera en una entrevista en L'Équipe hace varias semanas, destacó el hecho de haber ganado una suma importante de dinero pese a haber caído en primera ronda del Masters 1.000 de Montecarlo.
El propio Paire se refería a este hecho de esta forma. "Me importa un carajo este partido. Tengo un partido de dobles y luego me iré a casa, a dos horas en coche. Venir a estos cementerios me deprime. Nos decíamos que vienes a Montecarlo, uno de los mejores torneos del mundo y llegas, ves que está vacío y hay un ambiente triste que rara vez se ha visto. Me siento como un miserable cuando estoy sobre la pista. El circuito se ha podrido. ¡Pero al menos tengo 12.000 euros! Diréis: 'Está hablando de mucho dinero'. He cogido 12.000 euros para estar tranquilo en el hotel y luego irme a casa. Es perfecto".
Paire también lamentó la situación actual del que, para él, es uno de los mejores torneos del circuito y que este año se juega sin público en las pistas, además de cargar contra el sistema de burbujas en el circuito para evitar posible contagios por coronavirus. "Para las ratas muertas del tenis, estoy seguro que es genial venir aquí. Es como si estuvieran entrenando. En un momento dado, si tú conoces el circuito, conoces Montecarlo y ves cómo es esto ahora, te dan ganas de tirarte por la borda. Todos dirán que es como la vida normal, pero para mí, la vida normal apesta en este momento. Y en el circuito, lo mismo. El único momento en el que me siento bien es cuando llego a casa y no necesito ponerme mascarilla. Allí sí me siento feliz".