Garbiñe Muguruza, que este sábado (16:00, DAZN) disputa la final del Qatar Open, ya sabe que debutará la semana que viene en Dubái ante una rival de la fase previa por el lado más duro del cuadro. La española, que subirá un puesto en el ránking (15º) si gana a Kvitova en Doha, tiene una proyección complicada si avanza en el Emirato.

Por clasificación, en su camino estarían Anisimova en segunda ronda, Swiatek en octavos, Sabalenka en cuartos y Pliskova en semifinales antes de una hipotética final ante la cabeza de serie número uno, Elina Svitolina. Por el sector de la ucraniana marcha la otra española que tiene plaza directa en el cuadro principal, Paula Badosa, que este sábado buscará la final en Lyon ante la danesa Tauson.

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La catalana se verá en Dubái con la suiza Jill Teichmann (23 años y 54ª del mundo). Tampoco lo tendrá fácil Paula, que se cruzaría en segunda ronda con Kvitova y en caso de superarla, en octavos podría aguardarle Rybakina, en cuartos Bertens y en semifinales Svitolina, antes de una ideal final española ante Muguruza.

A mejorar resultados 

Muguruza alcanzó dos veces las semifinales en Dubái, en su primera participación en 2015 (cayó ante Pliskova) y en 2018 (le ganó Kasatkina). El año pasado perdió en cuartos contra Brady. Badosa se estrena en el torneo. En la previa, la española Cristina Bucsa cayó contra la ucraniana Tsurenko por un doble 6-2.