Fría venganza en Melbourne de una Muguruza imperial
Garbiñe hizo un partido sensacional contra Kenin, que le ganó en la final del Open de Australia de 2020. Se medirá en semifinales con Vondrousova. Serena renuncia.
Ya había jugado a un gran nivel en las dos anteriores rondas del Yarra Valley Classic contra Van Uytvanck y Pavlyuchenkova.Y este viernes, tras una jornada de descanso obligado porque no pudo salir de la habitación hasta las 21:30 de Australia, cuando que le dieron el resultado del test de COVID que tuvo que pasar tras detectarse el positivo de un empleado del hotel Grand Hyatt, Garbiñe Muguruza elevó su rendimiento a la máxima potencia para tomarse la revancha ante Sofia Kenin. Más de un año después de que la estadounidense le ganara en la final del Open de Australia, la española se vengó en la misma ciudad, aunque no en la misma pista, con un magnífico triunfo por un doble 6-2 en 71 minutos. Es la primera vez que gana a la vigente campeona del Grand Slam aussie en tres enfrentamientos.
La española fue una auténtica apisonadora con esa potencia de golpeo que exhibió en las anteriores citas de la semana y la precisión que tan lujosamente ha lucido en lo que va de torneo. El partido lo empezó con algunos nervios, quizá por ese recuerdo amargo de un gran título que tenía encarrilado y se le escapó. En su primer saque levantó dos bolas de break para convertirse después en dominadora absoluta del partido. Desde el 2-2 fue suyo con un parcial de 7-0 que noqueó a Kenin para sorpresa de su somnoliento entrenador y padre, que sufrió a su manera en la grada.
A Muguruza le salía todo y no depuso su actitud guerrera en ningún momento, ni cuando tenía el encuentro ganado y podía haberse relajado. Corrió como un demonio y destacó en la red, un territorio en el que está claro que ahora trabaja para mejorar. Y del saque, qué decir: 10 aces y unos porcentajes sobresalientes. Con esas sensaciones se enfrentará en semifinales este sábado (no antes de las 02:30, DAZN) a Vondrousova, que ganó a la argentina Podoroska en el super desempate: 4-6, 6-3 y 10-4. Nunca se ha medido con la checa de 21 años y 21ª del mundo.
Conexión Conchita
Tras el partido, a Garbiñe le preguntaron por la relación con su entrenadora, Conchita Martínez, y respondió con soltura: "Es muy especial, nos conocemos desde que yo era júnior y siempre hemos tenido una buena conexión. Además, cuando ella era capitana de Copa Federación compartimos momentos realmente duros e intentos. Ahora era el tiempo correcto para juntarnos, en esta etapa de mi carrera y como ella entrena. Creo que es una buena combinación". En rueda de prensa, valoró su éxito: "Estoy contenta con el nivel al que estoy jugando. Si se trabaja bien siempre se puede jugar a un nivel alto. Venía preparada para jugar contra ellas. Si he jugado bien, me he adelantado en los dos sets y eso te da tranquilidad". Muguruza confesó que "tenia muchas ganas de jugar este partido". "Me apetecía volver a jugar contra ella. Tenia esa espina clavada, así que contenta de haber ganado esta vez y de cómo lo hecho". Lo que está haciendo en Melbourne le da "certeza" de que está "haciendo bien las cosas" . "Hemos trabajado bien. ¿Si me ayuda para el Open de Australia?... no lo sé. Yo quiero pensar en el partido de mañana e ir viendo. He de seguir siendo humilde y salir a jugar sabiendo que todas están con mucha confianza".
Barty, directa a la final tras el abandono de Serena
Por la parte alta del cuadro, Ashleigh Barty, número uno del mundo, y la gran Serena Williams se iban a enfrentar en la otra semifinal, después de ganar ambas con apuros y en el super tie-break a Shelby Rogers (7-5, 2-6 y 10-4) y Danielle Collins (6-2, 4-6 y 10-6), respectivamente. Sin embargo Barty ya ha avanzado directamente a la final del torneo después de que Serena Williams confirmase su abandono en el torneo a causa de una lesión en su hombro derecho.